DERIVADAS DEL CASO KOLDO
Génova prepara ya una batería de medidas por el caso de la mujer de Sánchez: "Se acabaron las cautelas"
La sesión de control del pasado miércoles "lo cambió todo" y en el PP reconocen que “se acabaron las cautelas”. Al conflicto de intereses sumarán acciones políticas y valoran ya la vía judicial
Paloma Esteban
El PP está analizando una batería de medidas que afectan al presidente del Gobierno por la relación profesional entre su mujer, Begoña Gómez, y Air Europa -compañía que fue rescatada con más de 600 millones de euros públicos por el Gobierno- y que van más allá de la denuncia registrada en la Oficina de Conflictos de Intereses hace unos días. Esa, aclaran en Génova, fue la primera medida por la vía administrativa. Este fin de semana el partido ya anunció, además, que la ampliará.
En paralelo, la formación de Alberto Núñez Feijóo sigue valorando otros dos frentes. El político, sobre el que tiene competencias directas gracias a su mayoría absoluta en el Senado y capacidad de impulsar distintas iniciativas; e incluso el judicial, donde los dirigentes consultados apuntan al Tribunal Supremo si ese supuesto llega.
En el político, hasta el momento, todo se está articulando a través de la comisión de investigación sobre el ‘caso Koldo’. Pero eso puede cambiar. La estrategia de los conservadores está siendo la del goteo de anuncios. No quieren dar pasos antes de tiempo, reconocen, ni alejar el foco de presión de los dirigentes más afectados, como es el caso de Francina Armengol, a la que llevan días pidiendo su dimisión. En la cúpula conservadora dan por hecho que la trama va a ir para largo y las novedades no dejarán de surgir. Y consideran que es más “efectivo” abrir el abanico poco a poco.
Según el PP, "está acreditado que Air Europa financió la cátedra universitaria de la pareja del presidente del Gobierno desde apenas un mes después de que Pedro Sánchez llegara al Palacio de la Moncloa", y a ello se suman las relaciones de Gómez con Javier Hidalgo. Éstas se remontan a 2019, cuando se creó el hub de innovación turístico Wakalua, que llegó a firmar un contrato con el Africa Center del Instituto de Empresa (IE) que dirigía la esposa del presidente para el patrocinio de unas conferencias y la concesión de unas becas. Según el IE, sin embargo, este centro nunca recibió dinero de Air Europa, porque el convenio firmado se frenó por la pandemia y nunca se reactivó. La mujer del presidente, además, visitó la sede de la compañía en dos ocasiones en los meses de junio y julio de 2020 para reunirse con el consejero delegado. Justo a principios del mes de julio fue cuando el Consejo de Ministros aprobó el rescate de la aerolínea.
Los populares ponen el foco en que Sánchez no se ausentó de la reunión en la que se aprobó esa decisión, a pesar de que la Ley 3/2015 reguladora del ejercicio del alto cargo de la Administración General del Estado contempla que los responsables deben apartarse en en decisiones que puedan beneficiar económica o profesionalmente a un "cónyuge”.
Y a pesar de que hasta ahora, dicen en el núcleo duro de Feijóo, han optado por un perfil de oposición más contenido en el caso que afecta a la mujer de Sánchez, “esas cautelas se han terminado”.
El punto de inflexión se vivió el miércoles pasado en la sesión de control al Gobierno. Todos los titulares se fueron a la petición de dimisión que Sánchez hizo a Isabel Díaz Ayuso por el supuesto fraude fiscal de su pareja a Hacienda, que evitó pagar el Impuesto de Sociedades correspondiente y generó facturas falsas según ‘eldiario.es’ tras un negocio millonario de mascarillas en 2020. Pero en la dirección nacional del PP lo que hizo saltar todas las alarmas realmente fue la referencia que el jefe del Ejecutivo hizo a Marcial Dorado. No era la primera vez que el presidente se refería a la fotografía del narco con el líder del PP hace años.
Pero en esta ocasión Sánchez ironizó todavía más pidiéndole al líder de la oposición que hiciera “un ejercicio imaginativo” preguntándose qué haría Feijóo si el presidente hubiera tenido “una estrecha amistad” con “un capo del narcotráfico” con el que llegó a compartir vacaciones en distintos lugares, incluida Andorra, “donde presuntamente este narco blanqueó dinero”, dijo. “Usted pediría mi dimisión como es lógico”, pero “no lo hace porque fue usted quien desarrolló esa amistad, y esa es la diferencia conmigo”, continuó. “Usted, con ese historial, ha podido escalar hasta lo más alto de su partido político, y en el mío no habría llegado ni a concejal de pueblo”, remató.
Esas frases encendieron las alarmas en Génova. “Se acabaron las cautelas. Ahora vamos con todo y antes no era así. Hemos encendido un interruptor que estaba apagado”, explican en el equipo del dirigente gallego para hacer hincapié en que irán “a por todas” en el caso que afecta a Begoña Gómez. Antes de eso, Feijóo ya había advertido también desde su escaño en el Congreso: “Usted sabrá. Allá usted. En su casa no deben estar muy contentos”. Menos de una hora después el PP registraba la denuncia por un posible conflicto de interés y abría la veda.
Las comisiones de investigación
Aunque la vía judicial todavía aparece poco detallada en el plan del PP -tan solo que pasaría por manos del Supremo-, en el partido sí estudian distintas posibilidades en términos políticos. Los conservadores no han querido desvelar los comparecientes que llamarán a la comisión de investigación del Senado. Pero muchos dirigentes dan por hecho que Begoña Gómez estará en la lista. Y otras fuentes populares también reconocen que están estudiando otras comisiones de investigación más específicas donde la mujer del presidente podría tener que explicarse. La imagen de Gómez en una comisión de investigación no es cualquier cosa.
Una opción sería que la del caso Air Europa tomara cuerpo por sí mismo. Sobre todo, porque más allá de las informaciones periodísticas, en el sumario del ‘caso Koldo’ aparece un informe de la Oficina Nacional de Inspección del Fraude (ONIF), dependiente de Hacienda, en el que se vincula el inicio de la trama con el préstamo obtenido por Air Europa por parte del Gobierno para evitar su quiebra en lo peor de la pandemia de covid, como adelantó El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica. Apunta concretamente que la operación de las mascarillas, con el colaborador del exministro José Luis Ábalos, se fraguó durante las negociaciones llevadas a cabo en 2020 en el Ministerio de Transportes para rescatar la aerolínea. Los conservadores reconocen que sus iniciativas se irán concretando en función de cómo evolucionen las novedades. También Feijóo ha dicho en los últimos días que debería reabrirse el 'caso Delcy' por la "relación directa con la trama".
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