GOBIERNO DE COALICIÓN

El plantón de Colau a Collboni aumenta el malestar de Moncloa con Yolanda Díaz: "No quiere asumir su responsabilidad"

El escenario político catalán tensa aún más la coalición y eleva el cruce de reproches entre los socios

Los socialistas acusan a Colau de torpedear al Gobierno y complicar la frágil mayoría de la legislatura

Pedro Sánchez, María Jesús Montero y Yolanda Díaz, la semana pasada en el Congreso. / EP

Iván Gil / Ana Cabanillas

El adelanto electoral en Cataluña ha hecho tambalear la legislatura elevado las tensiones entre PSOE y Sumar dentro de la coalición de Gobierno. En Moncloa son cada vez críticos con lo que denominan “estrategia destructiva” de los Comuns, socios en Cataluña de Sumar. Por extensión, ponen en cuestión el papel de Yolanda Díaz, a quien fuentes de Moncloa acusan de “ponerse de perfil” y de no "asumir su responsabilidad" por revés sufrido la semana pasada.

Tras votar en contra de los presupuestos catalanes, forzando así la decisión de convocar elecciones, los de Ada Coalu han avanzado que harán lo propio con los presupuestos del socialista Jaume Collboni en el Ayuntamiento Barcelona. Un choque que desconcierta en la parte socialista Ejecutivo, donde no esconden su “preocupación” y alertan de sus consecuencias. 

Los socialistas reconocen el malestar de los republicanos con Sumar tras tumbar los presupuestos de la Generalitat, algo que podría afectar de lleno a la agenda legislativa del Gobierno. Sus votos son imprescindibles y temen que bloqueen las leyes que provengan de los ministerios pertenecientes al partido de Díaz. Una amenaza se suma a la de los diputados de Podemos, quienes con sus votos ya tumbaron en enero el decreto sobre los subsidios de desempleo que promovió la vicepresidenta segunda, generando ya entonces fuertes turbulencias entre los socios de Gobierno. 

Críticas cruzadas

La semana pasada supuso un punto de inflexión para los socios de coalición, con reproches cruzados que siguen intensificándose. En Sumar critican al ala socialista por gobernar "al ralentí" y dejar "en suspenso" la agenda de Gobierno, después de que la semana pasada reprocharan a Pedro Sánchez la renuncia "unilateral" a los presupuestos de 2024, que suponían una oportunidad para Yolanda Díaz a la hora justificar su utilidad en el Gobierno y vender sus éxitos en las próximas campañas vascas, catalanas y eueopeas.

Yolanda Díaz e Iñigo Errejón en el Pleno en el Congreso. / EFE

Mientras el socio minoritaria acusa a Moncloa de bajar los brazos, las críticas van a más en las filas socialistas, donde atacan a Sumar por su indefinición, una ofensiva puramente ideológica. "Sumar se pone de perfil cuando la situación se complica", censuran cargos del PSOE, que atribuyen esto al hecho de que "no tienen discurso". Consideran que las críticas de su socio minoritario hacia Sánchez por no presentar las cuentas es para evitar que les culpen por la inestabilidad. "No quieren asumir su responsabilidad", abundan.

Después del notable enfado que se instauró la semana pasada en Moncloa por no "controlar" a sus socios parlamentarios, ahora los socialistas ponen en duda el liderazgo de Yolanda Díaz y el argumento que la vicepresidenta segunda les trasladó, que apelaba a la "autonomía" de sus partidos aliados: "O no ha querido entrar o no le han dejado", resumen.

"Morder" la CUP

No sé cual es su estrategia electoral. No tienen una posición clara sobre los temas y ahora torpedean el presupuesto de Barcelona”, lamenta uno de los colaboradores del círculo más cercano de Pedro Sánchez. Más aún, explican, cuando el alcalde socialista podrá sacar adelante las cuentas pese a su rechazo, a través de una moción de confianza. Estas mismas fuentes solo se explican la estrategia en que los Comunes busquen "morder" en el caladero electoral de la CUP, de corte más antisistema. Independientemente de sus motivaciones, se desmarcan de su posición rupturista y reprochan a Díaz su incapacidad para intervenir y no “asumir la responsabilidad”. 

Pulsa para ver más contenido para ti

La sensación entre cargos socialistas es que la estrategia de los Comuns no beneficia en nada al Ejecutivo, al poner en jaque el apoyo de sus socios y la frágil mayoría que sustenta a Pedro Sánchez, y tampoco tendría una justificación electoral. Tanto es así, que un alto cargo de Ferraz señala a la actitud de la líder de este espacio, Ada Colau, por no "resignarse a no tener la mayoría", tras perder la Alcaldía de Barcelona el pasado mayo. "Veo un poco de nostalgia", deslizan las mismas fuentes: "No se puede ser siempre protagonista. Debería asumirlo y pasar a segundo plano".

Pulsa para ver más contenido para ti