El presidente del Poder Judicial pide a Sánchez que aclare su plan y evite opciones "aterradoras"

El presidente suplente del Consejo General del Poder Judicial, Vicente Guilarte, mueve ficha. Ha aprovechado la alusión que realizó en una entrevista televisiva el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la necesidad de reformar la ley si no se llega a un acuerdo político con el PP para renovar el órgano antes de que termine junio para volver a remitir a las presidencias del Congreso y el Senado su plan para desbloquear la situación.

También pide una aclaración de sus palabras y le recuerda, frente a una alternativa que califica de"aterradora", que los nombramientos en la cúpula judicial “deben persistir residenciados en el CGPJ por imperativo de la lógica constitucional más elemental".

En respuesta al ultimátum dado ayer por Sánchez al principal partido de la oposición, que parecía aludir a un cambio para sustraer definitivamente al Consejo del Poder Judicial su capacidad para designar puestos clave, como son los magistrados del Supremo, Guilarte remite su plan actualizado, que incluye como salida coyuntural la posibilidad de sortear los vocales entre la lista de 39 candidatos de que ya disponen las Cortes.

Por otra parte, Guilarte le da a Sánchez la bienvenida al “círculo” de quienes creen que el problema radica en la fórmula de elección de los altos cargos judiciales y consideran necesario someterlos a los principios de mérito y capacidad, pero advierte que “no es en ningún caso admisible propiciar cualquier zona de influencia del Gobierno, sea directamente o se enmascare a través de organismo o comisión interpuesta”.

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En este sentido, recuerda que con anterioridad a la entrada en vigor de la Ley Orgánica del Poder Judicial los nombramientos se efectuaban por el Ministerio de Justicia y señala: “No tiene sentido alguno volver a épocas pasadas si bien con distintos protagonistas. Ante las dudas que pueden suscitar las palabras del presidente es imprescindible aclarar este extremo, pues la amenazante alternativa esbozada resultaría aterradora y directamente encaminada a evitar cualquier acuerdo”.

Plan Guilarte

La alusión de Sánchez a una posible reforma parece remitir al Plan Guilarte, que lleva el nombre del actual presidente suplente y que busca que sean los propios jueces, sin mediar la intervención del Consejo del Poder Judicial, quienes elijan a los que ocupen puestos clave como son las presidencias de la Audiencia Nacional, las audiencias provinciales, los tribunales superiores de justicia o integren las salas del Tribunal Supremo.

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Son estos nombramientos, los del Tribunal Supremo --donde se han generado 25 vacantes desde que en marzo de 2021 se prohibió hacer nombramientos a un Consejo que lleva en funciones más de cinco años-- los que centran el interés político por la trascendencia de los asuntos que llegan a sus magistrados, que además tienen la competencia para juzgar a aforados como son diputados o altos cargos autonómicos. Para este órgano, Guilarte propone que sus magistrados sean nombrados por una comisión cualificada, mayoritariamente compuesta por vocales y por magistrados del propio tribunal, presidida por un vocal del CGPJ que sea miembro del Supremo.