El jefe de los Mossos carga contra los agentes que ayudaron a Puigdemont: "No merecen vestir nuestro uniforme"

El malestar de los mandos de los Mossos con el expresident Carles Puigdemont por haber burlado los controles policiales y haber huido tras su reaparición el jueves en Barcelona es profundo, y así se ha evidenciado este viernes en una rueda de prensa en la sede de la conselleria de Interior para dar explicaciones sobre el dispositivo organizado que se levantó sin detener al líder de Junts.

El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha acusado al expresident de haber tenido un "comportamiento impropio" de su cargo y de haber intentado "deslegitimar" la investidura de Salvador Illa, pero también lo ha hecho el jefe de los Mossos, Eduard Sallent, quien, tras negar haber llegado "ningún tipo de pacto" con el expresident, le ha acusado de no tener una "actitud leal" con el cuerpo policial. "No todo vale, no vale pasar por encima de las instituciones y de los Mossos d'Esquadra", ha espetado.

Además, Sallent también ha cargado contra los agentes que colaboraron con la huida del dirigente posconvergente, de quien ha dicho que "no merecen" vestir su uniforme, y ha anunciado una investigación interna que aclare cuál era su participación. También ha explicado que se analizará si la actitud de estos agentes puede tener "consecuencias penales" y "administrativas".

Sallent ha reconocido que tenían conocimiento de que algunos agentes colaboraban con Puigdemont en el extranjero cuando no estaban de servicio, pero ha avisado de que el hecho de que lo hagan dentro del Estado español marca un "hecho diferencial". "Estos señores aquí son policías, tienen deberes que no solo deontológicos, sino también legales. Comprometen nuestro deber [...] Han puesto el cuerpo en una situación que no nos gusta, que no nos gusta nada", ha remachado.

Así, durante una larga comparecencia en la que han dado todo tipo de detalles sobre el dispositivo preparado que se zanjó sin haber arrestado a Puigdemont y que contó con 602 agentes, Sallent también ha querido defender que no considera que los Mossos hayan hecho "el ridículo". De hecho, ha alegado que no se intentó detener a Puigdemont en Arc de Triomf porque confiaban en que cumpliría con su promesa e intentaría entrar en el Parlament. Pero no fue así.

Según los Mossos, valoraban que lo que quería Puigdemont era "participar en el pleno como electo" y que no debían trazar un plan como si fuera de clan "Jodorovich" o un miembro del "crimen organizado". "Lo que hizo se parece más a lo que hace el señor Jimmy Jump --un conocido espontáneo de diversos eventos-- que no a un regreso de un expresidente, que es la de asistir con toda la dignidad que se le supone a un president de la Generalitat", ha sentenciado.