CRISIS EN VENEZUELA

Feijóo exige la dimisión de Albares: “La diplomacia española no puede estar al servicio de un régimen dictatorial”

El líder del PP exige que el embajador en Venezuela sea reemplazado y que Sánchez "dé explicaciones" para aclarar que España "no es equidistante entre la extorsión y la civilización", evitando hablar de "golpe de Estado" como hizo Pons

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, junto al ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani. / TAREK/PP

Alberto Núñez Feijóo considera que el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, debe dimitir tras las coacciones denunciadas por Edmundo González en la embajada española en Venezuela. El líder del PP exige también el reemplazo inmediato del embajador y que Pedro Sánchez dé explicaciones cuanto antes de todo lo que ocurrió en la residencia del embajador en Caracas, para que quede claro que España “no es equidistante entre la civilización y la extorsión, entre la democracia y la dictadura”.

El jefe de la oposición hizo esas afirmaciones desde Roma, donde este jueves se reunió con la primera ministra, Giorgia Meloni, y el titular de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani. Feijóo compareció al término del encuentro, centrado en el debate migratorio que ocupa a todo el continente, pero que terminó eclipsado en buena medida por la crisis en Venezuela y la escalada entre el Gobierno y el PP de las últimas horas.

Feijóo no afirmó que el Ejecutivo de Sánchez sea cómplice de “un golpe de Estado” como dijo esta mañana Esteban González Pons, pero tampoco desautorizó sus palabras. El líder conservador aseguró que “el Gobierno español ha mentido” y que “la diplomacia española, que es el pilar esencial de la diplomacia europea en Iberoamérica, no puede estar al servicio de un régimen dictatorial”.

Haciendo partícipe a Tajani, que estaba a su lado en la comparecencia, Feijóo respondió a uno de los periodistas: “Pregunto retóricamente: ¿Le cabe en la cabeza al ministro de Exteriores italiano que se hiciera una cocción en una embajada italiana con el conocimiento del presidente del Consejo de Ministros de su país y con el conocimiento del ministro Exteriores?”, dijo. Y continuó: “¿Asumiría el Gobierno italiano un episodio de estas características? La respuesta es evidente”.

Feijóo aprovechó para recordar que el Parlamento Europeo ha reconocido este mismo jueves a Edmundo González como presidente electo, precisamente como hizo el Congreso en España con una iniciativa del PP que el PSOE rechazó la semana pasada. “La Unión Europea vuelve a elegir el camino correcto”, zanjó, lamentándose de que el Gobierno de Sánchez “haya llegado muy lejos”. “Se debe parar y nuestra posición ha quedado muy clara. El embajador tiene que marcharse, el ministro de Exteriores ha de presentar su dimisión, y el presidente de España tiene que dar explicaciones inmediatas”.

A pesar de las distintas preguntas a Feijóo sobre si compartía o no la declaración de su vicesecretario y considera que el Gobierno es cómplice de “un golpe de Estado” en el país de Venezuela, el líder del PP no empleó los mismos términos. Lo que sí repitió es que “bajo ningún concepto se puede tolerar que en una embajada española se produzcan coacciones” y que, por tanto, “el ministro de Exteriores esté relacionado con la misma”. Algo que Albares ha negado tajantemente.

El líder del PP afirmó desconocer “cuáles son las razones” en el posicionamiento del Gobierno, “que no quiere reconocer el resultado democrático de las urnas” y por qué “su partido vota en contra de la democracia en Venezuela” (en referencia a que se oponga al reconocimiento de Edmundo González como presidente electo). “No sé cuáles son las razones del señor Sánchez ni las razones del expresidente Zapatero. No sé si son razones de carácter político, ideológico o económico, pero sí le digo que si el presidente del Gobierno de mi país elige la dictadura me va a tener enfrente siempre”, reiteró Feijóo.

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El Gobierno, como el resto de ejecutivos de la Unión, sigue exigiendo la publicación de las actas de las elecciones al régimen de Maduro. Y por ahora no se ha sumado al reconocimiento como presidente electo. El PP insiste en considerar a Zapatero “el urdidor” de “la operación más sucia de la diplomacia española” en palabras de González Pons.

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