Cerca de 80.000 personas participan en la tercera marcha contra Mazón por la gestión de la DANA

80.000 personas mantienen la presión sobre el president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, que ha vuelto a ser el foco de la indignación en una tercera manifestación que ha recorrido las calles de Valencia para exigir responsabilidades por la gestión de la trágica DANA que ha dejado al menos 223 muertos y todavía hay tres personas desaparecidas. Esta vez, los agricultores han sido los encargados de encabezar la protesta, con siete tractores marcando el camino, como símbolo y a modo de reconocimiento a labor voluntaria, dejando a un lado el campo para "para sacar fango”.

Aunque en un primer momento la asistencia multitudinaria parecía no serlo tanto, la manifestación ha ocupado casi todo el recorrido entre la plaza de América y la de San Agustín, con esperas de más de una hora para comenzar la marcha. Al final, han sido 80.000 personas, según la cifra oficial emitida por la Delegación del Gobierno en los próximos minutos. La primera marcha, el 9 de noviembre, consiguió congregar a 130.000 personas; y el 30 de noviembre, fueron 100.000.

Más de 200 entidades cívicas, sociales y sindicales se han sumado a esta protesta, que ha modificado su recorrido para permitir la participación de la tractorada, así como de otros colectivos afectados, evitando también algunas de las zonas más concurridas en estas fechas navideñas, como la plaza del Ayuntamiento o de la Virgen. Entre las reivindicaciones que han lanzado, las organizaciones convocantes exigen "justicia y una respuesta contundente a la negligencia institucional", ya que "la pérdida de vidas por la inacción tiene unos responsables". La marcha ha arrancado sobre las 18 horas desde la plaza de San Agustín, al grito de "Mazón, dimisión".

Alexandra Usó, una de las portavoces de las entidades convocantes, valor la labor de las y los agricultores que “estuvieron desde el primer día quitando barro de las calles, quitando coches, cuando la administración todavía no se había dignado ni a entrar”. Por su parte, Ana Mar Bueno Cardona, otra de las portavoces, ha recordado que dos meses después de la dana aún no se han “depurado responsabilidades y las ayudas no están llegando”. Mientras, Anna Oliver ha afirmado que el Gobierno valenciano “insensible no se ha puesto en contacto” con los familiares de las víctimas mortales de la dana y no se les está ofreciendo ninguna “asistencia psicológica ni humana”.

Amparo López, trabajadora del teléfono de Emergencias 112 CV, sujeta la pancarta que marca el comienzo de la manifestación. Estuvo trabajando el día D desde las ocho de la tarde hasta las 6 horas de la mañana, de manera voluntaria, y el máximo de horas permitido. “Me habría quedado muchas más, por la magnitud de la necesidad, de las llamadas que teníamos. Fue muy duro, intentando coger el máximo de llamadas posible, sabíamos que igual era la última persona con la que hablaban”, ha explicado. López ha sentenciado: “La mayor responsabilidad de un político es saber dimitir”.

Lectura del manifiesto

Durante la lectura del manifiesto, los convocantes han denunciado que en lugar de "proteger la población, la Generalitat se ha limitado a intentar tapar la negligencia ante esta crisis". Esta misma semana, Carlos Mazón ha ofrecido nuevos detalles sobre esa comida en El Ventorro junto a la periodista Maribel Vilaplana el día D, que le impidió llegar al Cecopi hasta pasadas las 19 horas. Ahora, el líder del Ejecutivo autonómico dice que acudió en calidad de presidente de los populares valencianos y que, por tanto, la factura se entregará como marca la ley al Tribunal de Cuentas cuando el PPCV tenga que registrar sus gastos en este organismo fiscalizador.

Respecto a la gestión de los días posteriores a las inundaciones, los manifestantes critican que se retrasara "de forma inexplicable la llegada en las localidades afectadas de los cuerpos de emergencia e impidieron que acudieron efectivos otros territorios" y recriminan al Gobierno de España que no presionara de manera más "contundente" al Gobierno de Mazón ante su "inacción para intervenir con todos los efectivos disponibles".

El resultado, lamentan, ha sido que cuando se cumplen dos meses desde ese 29 de octubre, el pueblo valenciano se sigue viendo "abandonado" y "abocado a trabajar de manera solidaria y voluntaria" en las labores de limpiezas de los municipios afectados. En el manifiesto, también recuerdan la amenaza que supone la negación del cambio climático, así como la "especulación y la construcción desmesuradas".

Tras la lectura, los manifestantes han hecho sonar, a las 20.11 horas, la alarma que sonó el día 29 de octubre, cuando los municipios afectados ya estaban anegados. Después, se ha celebrado un minuto de silencio en homenaje a las 223 víctimas mortales que ha dejado la dana, y a las tres personas que continúan desaparecidas. El silencio se ha roto con los gritos de “Mazón, dimissió”.