«Una señorita de Sevilla es tan dueña de Las Ramblas y de la Iglesia de Santa María del Mar, que adoro, y del pabellón Mies van der Rohe, que también adoro, y del monasterio de Poblet como un señor de Barcelona lo es de la Torre del Oro, del Archivo de Indias, que adoro, y del Guadalquivir. Eso es España. Y nadie goza del derecho de admisión y mucho menos de expulsión». Así comienza un discurso que pronunció Cayetana Álvarez de Toledo durante un Círculo Ecuestre al que acudió el Rey Felipe y la princesa Leonor.
Álvarez pretendía mostrar su apoyo a la monarquía durante esta comida-coloquio celebrada en Barcelona para pedirle al jefe del Estado mayor presencia en la comunidad de Cataluña. “Señor, siga viniendo. Venga. Incluso venga más. Sí, Majestad: venga más a Cataluña. A Barcelona, por supuesto, Y también a Gerona, donde, de forma intolerable y por tanto inaceptable, le prohibieron ir. La Corona no debe renunciar ni un milímetro a Cataluña porque cualquier renuncia es un retroceso para la libertad”, expresó.
También señaló la importancia de impulsar «una nueva interlocución» con los constitucionalistas catalanes, ya que, según ella, la familia real «encarna mejor que nadie los valores republicanos», así como ha querido recordar y pedir «continuidad» al discurso de Felipe VI el 3 de octubre de 2017, dos días después del referéndum ilegal de independencia.