La Conferencia Episcopal Española ha publicado la hoja de ruta para la celebración del culto público en los templos durante la desescalada de las medidas impuestas por el Gobierno.
La Iglesia sigue prorrogando la dispensa del precepto dominical. Cuando se entre en la primera fase de desescalada, el aforo de los templos se verá reducido a 1/3 de su capacidad y a 1/2 en la segunda, obligando siempre a respetar la distancia de seguridad.
En las Eucaristías dominicales, la Iglesia recomienda aumentar el número de celebraciones cuando haya mayor afluencia de fieles.
Las pilas de agua bendita continuarán vacías y las puertas de las iglesias se mantendrán abiertas a la entrada y salida de las celebraciones para evitar el contacto. También se recomienda a los fieles el uso de mascarilla con carácter general.
Uno de los aspectos a tener en cuenta es la organización en el interior del templo. Para ello, la Conferencia Episcopal pide organizar, con personas responsables, la apertura y cierre de las puertas del templo, la distribución de los fieles, el acceso a la hora de comulgar y la salida de la iglesia al finalizar la misa.
Otra de las recomendaciones es ofrecer gel hidroalcohólico o similar, a la entrada y salida de la iglesia.
También pide evitar los coros en la parroquia. No habrá hojas de canto ni se distribuirán pliegos con las lecturas o cualquier otro objeto o papel. El cestillo de la colecta no se pasará durante el ofertorio, sino que serán los responsables del orden interno de la parroquia los que lo ofrezcan a la salida de la Eucaristía.
La paz se podrá sustituir por un gesto evitando el contacto directo. El diálogo individual de la comunión, se pronunciará de forma colectiva y la Eucaristía se distribuirá en silencio. Si el sacerdote es mayor, se establecerán ministros extraordinarios para distribuir la comunión.
Otras celebraciones
La celebración del Sacramento de la reconciliación y los momentos de escucha de los fieles: además de las medidas generales, se ha de escoger un espacio amplio, mantener la distancia social asegurando la confidencialidad. Tanto el fiel como el confesor deberán llevar mascarilla. Al acabar, se aconseja reiterar la higiene de manos y la limpieza de las superficies.
El Bautismo será un rito breve. En la administración del agua bautismal, hágase desde un recipiente al que no retorne el agua utilizada, evitando cualquier tipo de contacto entre los bautizandos. En las unciones se puede utilizar un algodón o bastoncillo de un solo uso, incinerándose al terminar la celebración.
En la Confirmación se puede utilizar un algodón o bastoncillo, como se ha indicado en el caso del bautismo. Obsérvese la higiene de manos entre cada contacto, cuando haya varios confirmandos.
Durante la celebración del Matrimonio, los anillos, arras, etc., deberán ser manipulados exclusivamente por los contrayentes. Manténganse la debida prudencia en la firma de los contrayentes y los testigos, así como en la entrega de la documentación correspondiente.
La unción de enfermos también será breve. En la administración de los óleos puede utilizarse un algodón o bastoncillo como se ha indicado anteriormente. Los sacerdotes muy mayores o enfermos no deberían administrar este sacramento a personas que están infectadas por coronavirus. En todo caso, obsérvense las indicaciones de protección indicadas por las autoridades sanitarias correspondientes.
Los funerales y las exequias seguirán los mismos criterios de la misa dominical. Aunque sea difícil en esos momentos de dolor, insistir en evitar los gestos de afecto que implican contacto personal y la importancia de mantener distancia de seguridad.
Visitas a los templos
Durante las dos primeras fases de la desescalada, no se permitirán las visitas turísticas. Sí se permitirán los lugares de oración y adoración evitando las concentraciones.