El Gobierno abre el grifo del dinero

Es una medida que permitirá a la administración central, a las autonómicas y a las municipales tener muchos más recursos públicos

01 oct 2020 / 04:00 h - Actualizado: 01 oct 2020 / 04:00 h.
"Presupuestos Generales del Estado"
  • Un operario manipula una máquina en un factoría de automóviles en Andalucía. EFE/Raúl Caro
    Un operario manipula una máquina en un factoría de automóviles en Andalucía. EFE/Raúl Caro

El Gobierno ha abierto el grifo del dinero público al suspender las reglas fiscales que controlan el déficit y la deuda y ha introducido la negociación de los próximos presupuestos en una nueva fase, ya que las administraciones podrán disponer de "la totalidad de los recursos" para contener los efectos de la pandemia.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha anunciado este martes, en rueda de prensa, la congelación de los objetivos de estabilidad presupuestaria a raíz de la recomendación de la Comisión Europea.

Es una medida que permitirá a la administración central, a las autonómicas y a las municipales tener muchos más recursos públicos.

Por ejemplo, los ayuntamientos. Tal y como ha explicado la ministra, los consistorios podrán acceder a los remanentes que tienen en los bancos sin poder siquiera tocarlos.

Era una "sinrazón", ha dicho Montero, pero a ello obliga la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que prohíbe a los gobiernos municipales acceder a ese dinero que conservan en las entidades bancarias porque, si lo hacen, incurrirían en déficit.

Gracias a la suspensión de las reglas fiscales, los ayuntamientos podrán a partir de ahora mover los remanentes "sin límite" este año y el que viene, según ha concretado la ministra.

El presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, Abel Caballero, alcalde de Vigo, ha calificado la medida como "extraordinaria noticia".

El portavoz del PP en la Federación, Jorge Azcón, regidor de Zaragoza, la ha atribuido al "triunfo de los alcaldes". Hace 20 días el Congreso derogó un decreto ley del Gobierno con una propuesta para usar tales remanentes porque la mayoría de municipios y de partidos se opuso.

También se beneficiarán las comunidades autónomas, cuyos responsables de Hacienda están convocados a un Consejo de Política Fiscal y Financiera el lunes próximo.

En tiempos de tramitación presupuestaria un Consejo como éste serviría para fijar los objetivos de estabilidad presupuestaria (déficit y deuda) de los tres próximos ejercicios.

Sin embargo, como no se aplicarán las reglas fiscales a las que obliga la UE, la ministra presentará unos niveles de déficit de referencia.

La administración central, el Gobierno, igualmente dispondrá de un margen más amplio para movilizar sus recursos, lo que unido al reparto de los fondos europeos, ensancha el campo de juego contra la crisis económica derivada de la pandemia.

Crisis que se prevé muy dura a tenor de las estimaciones que se van conociendo. El FMI ha acercado al 13 por ciento la caída de la economía española este año y la deuda pública se ha situado en el 110 por ciento del PIB.

Las administraciones, por tanto, necesitan dinero o, como ha subrayado la ministra, poner la "totalidad de los recursos al servicio de los ciudadanos". La congelación de las reglas fiscales ayudarán a ello.

Este anuncio lo ha dado Montero en el día en que vence el plazo constitucional para la presentación ante el Congreso del proyecto de nuevos presupuestos, según el artículo 134 de la Carta Magna.

Montero no ha precisado plazos ni fechas, pero sí ha dejado entrever que el comienzo de la negociación es inminente.

El vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, ha revelado este miércoles en el Congreso que las líneas maestras del proyecto presupuestario se encuentran prácticamente perfiladas.

La ministra de Hacienda ha confirmado que los avances van a buen ritmo. Si hace una semana el texto estaba redactado al "80 por ciento", esta semana lo está "al 90".

El propio Iglesias ha avanzado que serán el presidente, Pedro Sánchez, y él mismo los que den a conocer los pilares del proyecto.

Comenzará entonces la negociación, estancada desde hace días según han corroborado a Efe fuentes de cuatro grupos parlamentarios con fluida interlocución con el Gobierno.

El trámite espera aún la llegada a la Cámara del techo de gasto y de los objetivos de estabilidad (déficit y deuda), aunque fuentes de Hacienda han señalado que debido a la congelación de las reglas fiscales no será necesario el pronunciamiento de las Cortes Generales.

La Ley de Estabilidad Presupuestaria establece que las sendas de déficit y de deuda deben contar con el aval del Congreso y del Senado para que el Gobierno presente luego el proyecto presupuestario, pero en el Departamento de Montero sostienen que ese paso puede sortearse ahora.

La hipótesis ha encendido las alarmas del PP, cuya portavoz en materia económica, Elvira Rodríguez, apenas unos minutos después de terminar la rueda de prensa de la ministra, ha comparecido ante los medios para criticar este intento.

"Ha parecido insinuar que la cláusula de escape europeo que deja en suspenso el Pacto de Estabilidad y Crecimiento le permitirá eludir el control parlamentario", han sido sus palabras.

Dicha cláusula indica que en caso de acontecimiento imprevisto que se salga del control de un Estado y que afecte en gran medida a sus ingresos y gastos, los ajustes presupuestarios podrán flexibilizarse.

La Ley de Estabilidad Presupuestaria, además, en su artículo 11.3, también lo permite.

La negociación no ha comenzado, pero la voluntad de negociar es palpable. La portavoz de EH-Bildu, Mertxe Aizpurua, ha transmitido este miércoles a Sánchez que su formación quiere "dialogar y acordar" los presupuestos, siempre y cuando sean progresistas.

El presidente ha remarcado que aunque hay grupos entre "la ultraderecha" y "la derecha" que se han "autoexcluido" de "cualquier forma de ayudar a la gobernación de este país", confía en contar con la mayoría.