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Sede de Caixabank en Barcelona. / A. Olivé (Efe)
El Gobierno aprobará hoy un decreto ley que permitirá a las empresas acordar el cambio de sede social sin someter esa decisión a la junta de accionistas, lo que aceleraría la salida de Cataluña a las compañías que así lo dispongan.
La idea del Ejecutivo es que el decreto ley incluya una nueva disposición final que modifique la Ley de Sociedades de Capital con la idea de agilizar el cambio de sede de una compañía, según las mismas fuentes. En mayo de 2015, ante el interés de varias compañías por trasladar su domicilio social a otras comunidades autónomas, el Gobierno de Mariano Rajoy aprobó una disposición adicional que recogía que «salvo disposición contraria de los estatutos, el órgano de administración será competente para cambiar el domicilio social dentro del territorio nacional».
De esta forma allanaba el camino para que muchas empresas pudieran establecerse en otra región. Sin embargo, ahora se quiere ir más allá para permitir que también puedan cambiar su sede con el mero acuerdo del consejo de administración compañías que incluyen en sus estatutos que el cambio debe ser aprobado por su junta de accionistas.
En el caso del Banco Sabadell, que ayer aprobó su traslado a Alicante, sus estatutos ya contemplan la posibilidad de un cambio de la sede social con el único acuerdo del consejo de administración sin que tenga que ser aprobado expresamente por la junta de accionistas. El cuarto grupo bancario privado español, traslada su domicilio tras 130 años de historia. A su vez, el Banco Sabadell protagonizó la mayor subida del IBEX 35, al ganar el 6,16 por ciento, seguido de CaixaBank con un alza del 4,93 por ciento.
Al respecto del CaixaBank, que sin contar la integración de Popular en el Santander, es el banco minorista líder en España, con la mayor base de clientes del país, tratará hoy en un consejo de administración extraordinario el debate del traslado de su sede social fuera de Cataluña. Este cambio sería posible gracias a la modificación legal referida que le permitiría realizar este trámite sin que la entidad someta esta decisión a aprobación de la junta de accionistas.
Entre las ubicaciones que se barajan para que el banco que preside Jordi Gual ubique su sede social y pague allí el impuesto de sociedades, entre otros gravámenes, cobra fuerza en las últimas horas la opción de Baleares, según apuntan varias informaciones periodísticas.
En los últimos días, empresas que cotizan en la bolsa como Oryzon o Eurona ya anunciaron el cambio de sede ante la incertidumbre política existente en Cataluña.
El temor a una proclamación unilateral de independencia por parte de la Generalitat ha lastrado en los últimos días a las empresas catalanas en la bolsa, una situación que se ha revertido en el caso de las que ya han dicho que se marchan de esta comunidad.