El Gobierno prorrogará tres meses la moratoria de alquileres y la suspensión de desahucios para colectivos vulnerables puestas en marcha para paliar los efectos de la pandemia, unas medidas que finalizaban el 9 de mayo con el estado de alarma.
De esta manera se pretende garantizar "una vivienda digna y adecuada" a la espera de la llegada "dentro de poco" de la ley de vivienda, ha explicado Sánchez este miércoles durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados para presentar el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Este plan "de país", con el que España canalizará los 140.000 millones que va a recibir de los fondos europeos a lo largo de los próximos seis años, se aprobará y enviará a Bruselas a lo largo del mes de abril, ha señalado Sánchez.
Antes de presentar el plan, el presidente ha anunciado la ampliación por tres meses de la posibilidad de solicitar la moratoria o condonación parcial de la renta de alquiler cuando el arrendador sea un gran tenedor o una entidad pública.
También se amplía tres meses la opción de prorrogar seis meses los contratos de arrendamiento de vivienda en los mismos términos en que se venía haciendo, es decir, si el propietario no reclama la vivienda para sí ni hay un acuerdo distinto entre las partes.
Otra medida que se amplía es la suspensión de desahucios de la vivienda habitual de hogares vulnerables -de acuerdo a los órganos judiciales y servicios sociales-, incluidos los lanzamientos no derivados de arrendamientos cuando haya personas dependientes, víctimas de violencia sobre la mujer o menores de edad.
PLAN RECUPERACIÓN
En su intervención, Sánchez ha asegurado que el Plan de Recuperación es el "más ambicioso de transformación económica a lo largo de toda la Historia", ya que permitirá superar la crisis derivada de la pandemia y reformar el tejido productivo.
A corto plazo, las primeras inversiones previstas -unos 70.000 millones entre 2021 y 2023, la mitad de ellas en movilidad sostenible, rehabilitación de vivienda, modernización de la Administración, digitalización de pymes y 5G- permitirán impulsar la actividad económica y el empleo ya en la segunda mitad de este año.
Sin embargo, Sánchez ha puesto el foco en que el plan "va a ser un gran motor en los próximos años", ya que permitirá aumentar la productividad, la capacidad sanitaria, la transformación ecológica o la digitalización, así como modernizar la Administración y el mercado laboral.
Así, el plan supone "una apuesta sin precedentes por el capital humano", por ejemplo con la unificación de la formación profesional académica y para el empleo que el Gobierno prevé materializar en una ley en los próximos meses.
También fomenta la colaboración público-privada, tanto recabando propuestas de las empresas -el Ejecutivo ya ha recibido unas 4.000- como a través de los proyectos estratégicos para la recuperación y la transformación económica (PERTE), que permitirán lanzar proyectos "prioritarios y emblemáticos" como el del vehículo eléctrico.
En ese sentido, las manifestaciones de interés lanzadas por los distintos ministerios han recibido "millares y millares de iniciativas" por parte de empresas, tanto grandes como "pequeñas y medianas" porque la intención del Gobierno es "atender a todas las realidades empresariales y territoriales".
Ante las críticas de falta de transparencia planteadas por la oposición, Sánchez ha defendido que hay "bastante claridad" en el plan, aunque "lo que probablemente falta sea experiencia".