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Imagen del cartel de la bodega. / EFE - Ana F. Barredo
Los propietarios de la bodega leonesa Almázcara Majara que fue señalada por el Instituto de las Mujeres, órgano dependiente del Ministerio de Igualdad, por una valla publicitaria que consideraban que cosificaba a la mujer, se han mostrado "muy contentos" por la rectificación del Instituto de las Mujeres.
"Estamos muy contentos, satisfechos, porque entendíamos que teníamos razón", ha explicado uno de los propietarios de la bodega, Javier Álvarez, en declaraciones a Europa Press, tras conocer la decisión del Instituto de las Mujeres de rectificar su solicitud para que la bodega retirara una valla publicitaria con la etiqueta de uno de sus vinos.
Álvarez considera que ha influido el "revuelo mediático" causado por la polémica y el hecho de que "todo el mundo se ha posicionado diciendo que es una locura lo que planteaban".
"Nos han enviado un email diciendo que después de analizar la bodega, su historial, han visto que estamos hablando de una obra de arte, que no estaba fuera de contexto", ha añadido el propietario.
La polémica
La polémica surgió este miércoles cuando se hizo pública una carta del Instituto de las Mujeres en la que instaba a la bodega leonesa a retirar una valla con la imagen de un cuadro de una mujer en bikini, por considerar que "cosifica" a la mujer y la presenta como "un objeto sexual".
En concreto, se trataba de una valla publicitaria situada a la entrada del municipio de Molinaseca (León), que representa la etiqueta de un vino de la Bodega berciana Almázcara Majara y en la que se muestra la pintura de una mujer de espaldas con un bikini de corazones, en particular, la parte de la espalda y los glúteos. El Instituto de las Mujeres señalaba que había recibido quejas en relación a esta valla.
Este jueves, el Instituto de las Mujeres ha rectificado su solicitud, tras escuchar a las partes y analizar la información facilitada por la empresa.
"Revisando la imagen, siendo una obra de arte de la que caben diversas interpretaciones y tras conocer el contexto de su elaboración y utilización, podemos concluir que el requerimiento realizado pudiera ser desproporcionado", han explicado a Europa Press fuentes del Instituto de la Mujer.
En todo caso, el Instituto de las Mujeres defiende que "en ningún momento cuestiona el valor artístico de la imagen, ni las diferentes percepciones que genere", sino que traslada el "malestar en relación al uso publicitario de la imagen, a la entidad emisora de la publicidad".