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El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo atiende a la prensa. EFE/ Kiko Huesca
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, revertirá la ley trans que permite cambiar de sexo en el registro desde los 16 años y dará también marcha atrás a los cambios introducidos en la ley de plazos para que las menores puedan abortar sin necesidad de permiso parental.
El principal partido de la oposición votó ayer en contra de ambos proyectos legislativos, aprobados en el Congreso de los Diputados, y buscará modificarlos si Feijóo logra llegar a la Moncloa tras las próximas elecciones generales, según señalan fuentes del PP.
Acerca de la ley trans, que ha generado debate en el seno del PSOE y del feminismo, fuentes de la dirección nacional del PP subrayan que con Feijóo habrá una ley trans pero «no ésta», a la que, dicen, le queda de vigencia lo que a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
El PP rechaza la ley trans al considerar que puede generar consecuencias lesivas sobre todo en los menores, denuncia que puede ser un «nuevo sí es sí» y recalca que hay países dando marcha atrás a este tipo de normativas que reconocen la autodeterminación de género.
En el caso de la ley del aborto, Feijóo ha respaldado la ley de plazos que su partido recurrió ante el Tribunal Constitucional (TC), y ha reconocido que el aborto es «exclusivamente el derecho que tiene una mujer de acuerdo con la ley de su país». El PP no comparte sin embargo los últimos cambios introducidos en la ley.
Por ello, si gobierna el líder del PP recuperará la obligación de que las menores de 16 y 17 años cuenten con el consentimiento de sus representantes legales para abortar -que el Gobierno de Mariano Rajoy introdujo en 2015- y el plazo de reflexión de tres días.
El PP tampoco comparte el nuevo registro de objetores de conciencia para el personal sanitario.
Además, fuentes del PP señalan que el PP no ha abordado por ahora el debate de si recurrirán o no la nueva ley del aborto ante el Tribunal Constitucional, tras conocerse que este órgano de garantías avala la normativa de 2010.