La mujer de 54 años que el pasado sábado fue asesinada en Valladolid supuestamente por su pareja de 43, que también mató a su suegra y a otro hombre, lo había denunciado por malos tratos pero no tenía una orden de protección, según ha informado este martes la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones.
El hombre, vecino de Valladolid y que fue detenido la noche del sábado, se encuentra desde las 9:30 horas en el Juzgado de Instrucción número 4 de Valladolid después de que se haya negado a declarar ante la Policía Nacional, que le acusa de estas tres muertes violentas, así como de los delitos de allanamiento de morada, lesiones y robo con violencia ya que en su huida agredió a dos matrimonios de avanzada edad e intentó entrar en sus casas para esconderse y robar todo aquello que le fuera útil en su fuga.
La delegada, que ha participado en una concentración de repulsa a este último caso de violencia machista en la que también ha participado la consejera de Familia de Castilla y León, Isabel Blanco, ha añadido que el detenido es "extremadamente peligroso" y la rápida intervención de la Policía Nacional con la colaboración ciudadana ha permitido evitar un mal aún mayor.
Se trata de la vigésimo séptima víctima de la violencia machista en lo que va de año, la 1.157 desde 2003, fecha desde la que hay estadísticas fiables.
Barcones también ha informado de que el hombre de 72 años que fue acuchillado mortalmente y el detenido se conocían, aunque no ha precisado de qué.
El pasado sábado por la tarde, una mujer de 78 años y su hija, de 54, aparecieron muertas, esta última con heridas de arma blanca, tras un incendio originado en su vivienda de Valladolid, mientras que un hombre de 72 años también apareció muerto en otro incendio declarado en una vivienda próxima.
A las 16:25 horas de ese día, una llamada alertó en la Sala de la Policía Nacional, procedente del Servicio de Emergencias 1-1-2, de que se había declarado un incendio en una vivienda de la calle Marqués de Santillana, por lo que se envió al lugar a dotaciones policiales y al servicio de bomberos.
Una vez extinguido el fuego, se localizó en el interior de esta vivienda el cadáver calcinado de un hombre, que presentaba síntomas de muerte violenta, en concreto había sido apuñalado.
Solo cinco minutos después, a las 16:30 horas, se recibió en la misma sala la llamada de una mujer que, desde su teléfono móvil, indicaba que no sabía qué le pasaba a su hija, que se encontraba en la vivienda ubicada en la calle Linares, donde también se declaró un incendio.
Una vez extinguido este último, aparecieron en el interior del domicilio los cadáveres calcinados de dos mujeres, uno de los cuales presentaba síntomas de muerte violenta, también por arma blanca.
Más tarde, a las 23:00 horas en la calle Góngora, muy cerca de donde se produjeron los dos sucesos, la Policía detuvo a un hombre de 43 años por agredir a dos matrimonios de avanzada edad con la intención de entrar en sus casas. La primera de las agresiones se produjo sobre las 22:30 horas en la calle Amor de Dios y, la segunda, a las 22:50 horas, en la calle Gutiérre de Cetina.
Este último matrimonio tuvo que ser trasladado al hospital debido a las lesiones que sufrió y, según la investigación de la Policía Nacional, la intención del agresor era introducirse en los domicilios de sus víctimas, algo que no consiguió.
Todas estas calles se encuentran muy próximas entre sí, y la Policía había desplegado un importante dispositivo en este barrio vallisoletano de La Rondilla para esclarecer los tres homicidios.
Por su parte, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha lanzado un mensaje de tranquilidad y ha añadido que La Rondilla, donde ha ocurrido este "terrible suceso", es tranquilo.
Se trata de unos hechos "puntuales" que "no responden a una situación de fondo", ha dicho el alcalde, que ha felicitado a la Policía por su rápida actuación, que ha evitado un mal mayor.
Se trata de la vigésimo séptima víctima de la violencia machista en lo que va de año, la 1.157 desde 2003, fecha desde la que hay estadísticas fiables.
El número podría incrementarse a 28 (y a 1.158) si la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género confirma que el ocurrido el pasado sábado en Sevilla, en el que fue asesinada una mujer de 44 años, se trata de un nuevo caso de violencia machista.
Fue este lunes cuando la ministra de Igualdad, Irene Montero, reaccionó a las muertes de las dos mujeres recordando que en tan solo 24 horas se investigaban ambos sucesos por violencia de género. "Todas las administraciones debemos revisar hasta el último protocolo para llegar siempre a tiempo. Es una cuestión de Estado salvar las vidas de las mujeres", escribió en su cuenta de Twitter.