La aventura del misterio

Aparición de carretera en Castilblanco de los Arroyos

Hay carreteras en la provincia de Sevilla que tienen un halo de misterio especial y hasta cierto temor, por parte de los conductores, de pasar por ellas, una es la que tiene su acceso a la localidad sevillana de Castilblanco de los Arroyos

25 abr 2023 / 04:00 h - Actualizado: 25 abr 2023 / 04:00 h.
"La aventura del misterio"
  • Aparición de carretera en Castilblanco de los Arroyos

Mi buen amigo, el excelente abogado sevillano Gustavo Prieto, de Román & Prieto, ya me indicó, hace un par de años, sucesos extraños en esa misma carretera y no son pocos los relatos que conocen de la misma.

En estas últimas semanas son dos las que hacen acto de presencia en la crónica del misterio de Andalucía y de Sevilla en particular en este mismo entorno. Fue un amigo, Ángel Gómez, quién regresaba de hacer unas gestiones en esta misma localidad cuando le ocurrió lo imposible.

«Cuando estaba ya pasando el cartel de «Barranco Hondo», en dirección para bajar a Sevilla, sobre las ocho y media de la noche, vi como «algo» había a un lado de la carretera, era una especie de bulto, una silueta. En un primer momento pensé que era alguien con un plumas negro pero a medida que me acercaba a su posición vi que era extraño, era como un silueta que estaba allí en el arcén pero casi metido en la carretera, fíjate que, no viniendo coches hacia mi posición, ocupé el centro de la carretera y al pasar a su lado sólo te puedo decir que llevaba como una especie de de capa o hábito o es que era todo como si fuera cubierto por eso mismo. Fue muy raro. Claro, volví a pegar un volantazo por que aquello hizo el ademán de ponerse en medio del carril y aceleré, cuando miré por el retrovisor no vi a nadie cuando segundos antes estaba allí mismo» decía el testigo de este extraño incidente.

Más conocida es la historia de la profesora Verónica Whitaker que en esta misma carretera, la C-433, en la zona de «Barranco Hondo» pudo ver lo que ella explicó de la siguiente forma: «Era una mujer que vestía una túnica negra, tenía los brazos extendidos y parecía estar en mitad de la carretera sin moverse”. Abundando en detalles decía: “Vestía una túnica negra muy larga y que de los brazos colgaba algo, otros trozos de tela, tenía el cuerpo muy elegante, muy fino (...) Sentí miedo y también escalofríos, me produjo un sentimiento de miedo, en mitad de la noche y encontrarte a alguien así en mitad de la carretera impresiona”.

Igualmente, el pasado fin de semana, encontramos a Luis Cabrera, que venía de pasar un día en familia: «Volvía de noche, los críos atrás y mi mujer en el asiento del copiloto como se dice. A la altura de «Barranco Hondo» vimos como salía del arcén un hombre y se quedaba plantado en medio de la carretera. Yo, aun a una distancia razonable saqué las «largas» del coche pero allí se quedó. Cuando estaba a unos quince metros de él me paré, porque no se quitaba y por miedo, era como una especie de sombra sin rasgos definidos que estaba en medio de la carretera como si tal cosa. No interactuaba, no hacía nada, sólo permanecía inmóvil allí y nada más. Mi mujer decía que diéramos marcha atrás y yo me esforzaba por distinguir algo pero era imposible. La visibilidad era clara pero, la verdad, allí no había «bola que rascar», entonces mi hijo Álvaro dijo: «Papa, ¡se está acercando!» y cuando venía para nosotros desapareció. Es, con diferencia, uno de los peores momentos que he pasado al volante y, aún hoy, no sé qué pasó« concluía.

Son fenómenos extraños que vienen a suceder en esta carretera y en «Barranco Hondo» donde parece que habita, nuevamente, el misterio.