La aventura del misterio

Construcciones mágicas de Sevilla

No sabemos bien qué impulsó a aquellos hombres de la Edad de Cobre a erigir tan importantes monumentos...

26 sep 2021 / 04:00 h - Actualizado: 26 sep 2021 / 04:00 h.
"La aventura del misterio"
  • Construcciones mágicas de Sevilla

En Valencina de la Concepción, a poco menos de 6 kilómetros de la vieja Híspalis. De gran belleza y desde donde podremos contemplar una exquisita vista de Sevilla hemos de encontrar su origen en la Edad del Cobre, de la que se han encontrado enterramientos realizados con grandes piedras tipo dolménico. Son los llamados dólmenes de Matarrubilla, La Pastora y Ontiveros, su datación se enmarca hacía los 3000 a.C. y son de los más impresionantes lugares de poder del territorio español. El de Matarrubilla, tiene una peculiaridad que la hace especial: tiene una cámara de bloque de piedra negra que era utilizada para las ofrendas a sus dioses.

No sabemos bien qué impulsó a aquellos hombres de la Edad de Cobre a erigir tan importantes monumentos pero sin duda algo muy importante, de nuestra Física o no, encontraron en este paraje... Aquellos hombres del Calcolítico tenían su hábitat en el fértil valle del Guadalquivir, allí se establecieron como comunidad agrícola y el río que les dio la Vida también les daría el Conocimiento. Cerca de ellos las colinas del Aljarafe, desde donde se divisaba y dominaba todo un paisaje indescriptible, el lugar reunía todos los condicionantes que un asentamiento de hombres primitivos podrías desear.

Allí, erigirían su primer elemento de marcación como Lugar de Poder. Hacía el 1.500 a.C. levantaron el Dolmen de La Pastora, en torno a él los arqueólogos hallaron restos de un importante contingente poblacional: un poblado, fosos, silos, restos de cabañas, etc., que evidencian el asentamiento en la zona de un importante centro de poder territorial.

En Valencina de la Concepción encontramos igualmente el llamado “Ídolo Placa” e “Ídolo Antropomorfo”, datado hacía el 3.000 al 2.100 a.C. Se trata de una pieza enmarcada dentro de un ajuar funerario. En este mismo enclave se han encontrado restos de una importante necrópolis. Allí tenemos de forma destacada los dólmenes de gran tamaño caracterizados por presentar una cámara o tholos de tendencia circular, estos están precedidos por un corredor que en algunos casos destaca por sus amplias dimensiones en cuanto a su longitud, superando los cuarenta metros.

También en la zona encontramos los dólmenes de Matarrubilla (hacia 1800 a.C.), La Pastora y Ontiveros (ambos de hacia 1500 a.C,) y el de Montelirio con importantes aportaciones en ajuar funerario y elementos de ornamentación.

Se les llama los “Gigantes de Valencina” y nos muestran un amplio repertorio de las técnicas de la arquitectura megalítica. En sus construcción destaca el empleo de ortostatos de gran tamaño, igualmente el uso de mampostería de pizarra para la realización las paredes. “Innovaciones” como las cubiertas adinteladas hasta la falsa cúpula realizada por aproximación de hiladas. Pero sobre todo hemos de destacar que esta superestructura tumular se hallaba en perfecta comunión con el paisaje camuflando a los ojos del ser humano.

El Dolmen de Matarrubilla se erige hacía el 1.800 a.C., destaca por su largo corredor de más de 30 metros de longitud que alcanza la cámara que lo remata, el monolito pétreo se trata de una mesa de ofrendas, y la reflexión la dejamos en una cita sobre este mismo dolmen: “no puede dejar de reflexionar sobre el tipo de ceremonias que, hace más de cuatro mil quinientos años, realizarían allí aquellos seres humanos que en la penumbra del interior del dolmen lloraban a sus difuntos. El culto a los muertos. la creencia en la segunda vida”.

No nos desplazaremos demasiado y a 20 kilómetros de Sevilla encontramos la localidad de Albaida del Aljarafe. Cargado de Historia tuvo una destacada aportación en la época romana que hizo que llegara a acuñar monedas con su nombre. En Albaida es indispensable visitar tres lugares:


1. La Fuente Archena.
2. La Fuente Salobre (con restos Árabes como galerías, acequias, etc.).
3. La Atalaya militar Torre-Mocha o torre de Don Fadrique.

Éste último infante de Castilla e hijo de Fernando III “El Santo” y de Beatriz de Suabia, hermano de Alfonso X “El Sabio”.

Albaida del Aljarafe está ubicada en el corredor arqueológico del Guadiamar, de gran valor, así el Diario “ADN” de la mano del redactor Jesús C. Urbano publicaba el 19 de Septiembre de 2009 en sus páginas: “Unos trabajos de «prospección sistemática» realizados a unos 30 kilómetros de la capital sevillana han permitido descubrir hasta 90 nuevas localizaciones arqueológicas con restos de diferentes épocas y edades que están siendo estudiados para su conservación y posterior exposición.


Estas prospecciones tendrán continuidad con futuras excavaciones en un radio de unos 17 kilómetros en el entorno del río Guadiamar, en suelos de los municipios sevillanos de Olivares y Albaida del Aljarafe.


Además de su valía paisajística y, tras el proceso de restauración medioambiental que siguió a la rotura de la balsa de lodos de Boliden -donde curiosamente la noche del desastre ecológico se observaron Objetos Voladores No Identificados sobre la zona- , el Corredor del Guadiamar se erige como el nuevo epicentro de la arqueología en la provincia.


La Universidad de Sevilla y el Servicio Municipal de Arqueología que comparten los ayuntamientos de Olivares y Albaida del Aljarafe han promovido la realización de nuevos trabajos con resultados sorprendentes.


El director de este servicio arqueológico, Pedro Rodríguez, ha explicado a Efe que durante los dos últimos años se han realizado en zonas rurales y urbanas de Olivares y Albaida del Aljarafe unas labores de «prospección sistemática e intensiva del territorio total» que han concluido en el descubrimiento de 90 yacimientos en la zona.


Así, 15 prospectores, equipados con GPS y comunicaciones de radio, han ido trazando «polígonos» que «encierran» yacimientos y posteriormente a esta labor de delimitación, se ha batido la superficie y se han localizado restos.


Después se han realizado mediciones de densidad para abrir el camino para la realización de excavaciones futuras que puedan alumbrar nuevos descubrimientos.


Los ayuntamientos de Olivares y Albaida han iniciado los trámites para declarar zona protegida los suelos donde se han descubierto restos arqueológicos, la mayoría de la época romana, aunque también se han encontrado yacimientos del periodo Calcolítico (en torno al 3.000 antes de Cristo).


El arqueólogo municipal ha subrayado que, junto con los dólmenes de Valencina de la Concepción y Castilleja de Guzmán, los restos localizados en el fértil entorno del Guadiamar constituyen «otra de las grandes huellas de la primera Edad del Hierro y de la última del Bronce» en la provincia de Sevilla.


«Toda la Cornisa Noroeste del Aljarafe conforma una franja con yacimientos prehistóricos de primer nivel en España», ha asegurado Pedro Rodríguez.


El Consistorio olivareño, de hecho, está construyendo un Centro de Interpretación de los nuevos yacimientos para poner en valor los restos localizados y recrear la «huella arqueológica» del Guadiamar.


«Este centro va a servir de lanzadera a nuevas excavaciones», señala el arqueólogo Pedro Rodríguez, que abunda en la necesidad de dotar de protección frente a procesos urbanizadores los suelos donde se han hallado restos.


Además de a las edades prehistóricas, los nuevos yacimientos apuntan a la floreciente huella romana, que dan continuidad al importante yacimiento de «Laelia», una antigua ciudadela romana ubicada en Olivares y que busca ser declarada Bien de Interés Cultural (BIC).


Una parte de la edificación romana de Laelia se levantó sobre una base tartésica y en su recinto se han localizado restos «importados» de Egipto.


La declaración como BIC de esta ciudad romana servirá como «muro de protección» frente a los trabajos de construcción de la línea de alta velocidad ferroviaria entre Sevilla y Huelva, cuyo trazado inicial amenaza a estos destacados restos, entre los que se encuentra un acueducto para el transporte del agua desde el hoy río Guadiamar hasta la antigua ciudad romana de Itálica, ubicada en la actual Santiponce (Sevilla)”. Lugares de gran interés, donde uno, en determinadas ubicaciones “carga las pilas” o halla lo imposible precisamente sobre ellos...

Hemos de añadir un curioso dato que se repite en otros tantos llamados “Lugares de Poder” como lo es su alta incidencia en avistamientos de Objetos Voladores No Identificados, los OVNIs tan dados a recorrer las localidades del Aljarafe sevillano. Y es que este lugar tiene algo muy especial...

Dentro del Aljarafe sevillano y de su entorno hemos de visitar el enclave de “Mesa Redonda”. Un paraje natural de extraordinaria belleza, un lugar que irradia características especiales: energías telúricas, de agua, aparición de misteriosas luces... La magia inexplicada de la naturaleza y lo extraño.