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Dragon Ball FighterZ supone el mejor regreso de Goku y compañía al mundo de los videojuegos. -
Para avanzar en la historia es necesario moverse por un tablero lleno de combates y desafíos. -
Los personajes y sus técnicas lucen gráficamente espectacular. -
El juego incluye personajes de todos los arcos argumentales, incluido Dragon Ball Súper.
El videojuego más frenético del anime por excelencia
Goku regresa más fuerte que nunca al mundo de los videojuegos con ‘Dragon Ball FighterZ’, un título en 2D basado en intensos y espectaculares combates por equipos y con una historia inédita de la franquicia
Si algo nos ha enseñado la historia de Dragon Ball a lo largo de sus más de treinta años de existencia es que no hay obstáculo imposible de superar si se actúa con confianza, decisión y perseverancia. Esta parece haber sido la máxima que ha seguido Arc System Works durante el desarrollo de Dragon Ball FighterZ. El resultado: un videojuego fan service inconmensurable.
Tres no son multitud
Dragon Ball FighterZ es un videojuego alejado de lo que el usuario está acostumbrado a ver en esta franquicia. Este es un juego de lucha en 2D cuyo principal aspecto jugable es la realización de los combates en equipos de tres contra tres para crear peleas frenéticas, rápidas e intensas. El jugador debe olvidarse de tener un amplio escenario por el que moverse volando. Los espacios son reducidos, perfectos para el tipo de peleas que se buscan y las técnicas sencillas a realizar: están los típicos ataques normales, medios y fuertes, las ráfagas de energía, cargarse de energía y la defensa. También cabe la posibilidad de hacer los ataques finales como el clásico Kamehameha de Goku o el Final Flash de Vegeta, pero para ello hay que realizar una combinación que a veces puede ser difícil por la intensidad del combate.
La clave para hacerse con la victoria consiste en encadenar combos de golpes y en la gestión del equipo de personajes. El jugador tiene en todo momento la posibilidad de ir intercambiando luchadores. Al hacerlo, el personaje que ha sido sustituido recuperará parte de la salud perdida, cosa que es imposible si es vencido. De igual forma, se puede llamar temporalmente a un aliado para que le lance un ataque especial mientras el luchador principal de nuestro equipo pelea. Asimismo estando en un juego de Dragon Ball las Bolas de Dragón de alguna forma u otra tenían que salir. Dependiendo de los combos se van desbloqueando. Una vez que estén las siete esferas reunidas se podrá invocar a Shenron y que nos conceda una ventaja: resucitar a un aliado caído, recargar la energía, restablecer la salud u obtener la inmortalidad.
Plantilla de luchadores
El acierto también se traslada a la elección de la plantilla de personajes que se pueden escoger. En total son 24 los luchadores seleccionados para la ocasión ya abarcan todos los arcos argumentales de la franquicia, salvo Dragon Ball GT. A los imprescindibles Goku, Vegeta o Gohan se unen los enemigos clásicos de la saga como Freezer, Cell o Kid Bu y secundarios como Gotenks, Androide 18 o Nappa. También tiene representación la historia de Dragon Ball Super con la presencia de Black Goku, Beerus o Hit, así como las versiones a desbloquear de Goku y Vegeta en Super Saiyan Blue. Hablando de transformaciones, no se puede convertir a los personajes en sus versiones más características cuando se quiera. La forma de lograrlo es realizando una combinación de botones concreta para ejecutar el ataque.
Es en este punto cuando se demuestra que Dragon Ball FighterZ es un videojuego que, aunque puede disfrutar todo el mundo, está especialmente dedicado a los seguidores de la saga al dar oportunidad de controlar a sus personajes favoritos y poder emplear las mismas técnicas que en el manga. La opción de usar la guadaña de Black Goku, los fantasmas de Gotenks e incluso los ataques devastadores capaces de destruir el escenario y hacen que en todo momento el usuario tenga la sensación de que forma parte del manga.
Historia inédita
Los juegos de esta franquicia se han caracterizado en los últimos años por repetir una y otra vez los combates más famosos del manga y la serie de televisión de Dragon Ball. Tras unos tímidos intentos de presentar variaciones en la minifranquicia Dragon Ball Xenoverse, Dragon Ball FighterZ tiene una historia inédita y alejada de lo que el usuario se conoce de memoria. La trama se divide en tres arcos argumentales que comienza con la pérdida de poder de todos los héroes y si quieren utilizarlos deben dejar que un alma (el jugador) los posea. Además han aparecido versiones malvadas de todos y los villanos que en su día vencieron han resucitado. Todo parece guardar relación con la Androide 21, un personaje especialmente creado para esta ocasión. La forma de moverse por el Modo Historia es a través de un tablero en el que el usuario puede escoger la ruta y participar en combates con diversa finalidad: desde desbloquear a nuevos personajes hasta avanzar en la trama luchando contra jefes, pasando por combates relleno que hacen subir de nivel. El jugador tiene la posibilidad de equipar tres ventajas, entre las que destaca la restauración progresiva de salud y poder hacer ataques más fuertes.
Diversión individual
Al margen de la historia y continuando con las posibilidades de jugar individualmente está el Modo Arcade. Tres circuitos diferentes compuestos por tres, cinco y siete combates en los que, dependiendo de lo bien que se haga la ruta de combates varía. La forma de decidir el camino va en función de la nota que se obtenga al final de cada enfrentamiento. Si la puntuación es alta, la siguiente batalla será más dura, de la misma forma que si no se hace demasiado bien el camino será de un nivel de dificultad inferior. En definitiva, este modo de juego se va ajustando a la habilidad del usuario y tiene como finalidad que cada uno se vaya poniendo a prueba. Al completar cada circuito se desbloquea su versión difícil, aumentando el desafío más si cabe.
Por otro lado, hay un Modo Entrenamiento para poner en práctica todas las habilidades de los personajes. En este modo el jugador marca su ritmo, pudiendo también ensayar combos (diez por personaje) o participar en el Tutorial donde se explican todos los tipos de técnicas –ofensivas y defensivas–. En la vertiente individual tampoco hay que olvidar el Modo Torneo y luchar contra oponentes controlados por la IA o contra amigos.
El más fuerte del mundo... ‘online’
Es en el apartado online donde se le saca más partido a Dragon Ball FighterZ. Antes de empezar a jugar, el usuario es situado en una sala donde tienen cabida hasta 64 jugadores. Lo más llamativo es que, si por ejemplo no encuentras con quien combatir, existe la opción de cambiar de sala sin importar la ubicación geográfica, es decir, si estás en Europa puedes trasladar tu personaje a América o Asia y probar suerte allí. Esto es una ventaja teniendo en cuenta que a veces es complicado encontrar un oponente para determinado modo de juego.
Las opciones online son muy variadas. Por un lado están las Partidas Igualadas en las que, dependiendo del resultado, se sumarán o restarán puntos que nos harán subir o bajar en los rankings mundiales. Las Partidas Informales, en cambio, dejan a un lado el factor estadístico y están destinadas a aquellos que simplemente quieran ponerse a prueba con otro jugador. Esta última opción es muy similar al hecho de poder luchar en la Arena central contra otro contrincante con la salvedad de que cualquiera puede contemplar la pelea. Por último, también se pueden crear pequeñas salas para ocho jugadores o rings, donde se pueden cambiar las reglas de la partida.
Independientemente del modo de juego que se escoja, la mecánica de juego es la misma: se lleva la victoria el usuario que consiga ganar dos veces al rival. Al hacerlo se obtienen zenis (la moneda del universo Dragon Ball) para consumir en la tienda. En este lugar se pueden comprar cápsulas de premio como nuevos colores para las vestimentas de los personajes, iconos para saludar o otros usuarios y avatares.
Un último aspecto a analizar es precisamente ese: cómo lucen los personajes. Gráficamente el juego es espectacular representándose los luchadores igual que en el manga, no solamente en apariencia sino también en la recreación de las técnicas y sus efectos en pantalla. Sencillamente impecable. Respecto al apartado sonoro, el juego solamente permite oír las voces en japonés o en inglés subtituladas. Preferiblemente es mejor la primera opción para oírlas en versión original y sentirse aún más parte del universo creado por Akira Toriyama.
Conclusiones
Dragon Ball FighterZ, en definitiva, es el mejor juego de Dragon Ball de los últimos años ya que une la esencia de la saga con el hecho de ser un fantástico juego de lucha. Las peleas en equipos, su apartado gráfico y sonoro, su historia original, sumado a poder participar en una amplia variedad de modos de juego individuales y multijugador, empleando a los personajes y sus técnicas de la franquicia hacen que este juego sea un deseo concedido para los fans.