No es que en Andalucía dure mucho el invierno pero lo cierto es que también hay que preparar a tu peludito para pasar esos meses importantes para su salud y que se encuentre feliz y a pleno confort. Pero para ellos debemos saber cómo actuar.
Lo primero es tener todo previsto para el descenso de temperatura que se avecina, hay que hacer que esté cómodo y parte de todo ello, importante, es visitar a tu veterinario para una revisión general. Si observas que está más decaído o inapetente que de costumbre procura hacerlo observar así como el comportamiento que tiene. Importante es observar el hocico y si este está seco o no. El invierno (o el otoño, depende en que latitud se encuentre) es la época que más problemas suele plantear y más inconvenientes de salud pues generar en la mascota. Que no tenga parásitos también es importante.
El pelaje del perro es importante pues actúa de elemento termorregulador y es muy importante para el animal. La piel debe estar hidratada y es fundamental que se le cepille también con regularidad. Además ese cepillado le ayuda a distribuir la grasa y mejora su circulación, le resulta estimulante. Si lo sacas a la calle de paseo y hace frío lo puedes proteger con un chaleco especial o un impermeable, eso evitará la humedad y el agua, si llueve lograrás que no se moje y eso le agradará. Debes incidir en ello si el perro tiene el pelo corto, pues estará más expuesto a los elementos.
Si sueles bañarlo usa gel especial y acondicionadores suaves para perros que hace que se encuentre mejor y la humedad en invierno es más notable. Debes secar bien a tu mascota y no dejes que si se moja en la calle, por la lluvia, esté mojado, debes secarlo para evitar una hipotermia o que pueda contraer una enfermedad.
Sus patas son un elemento a cuidar y muy sensibles tanto en verano como en invierno, tanto que debes protegerla lo mejor posible. Para ello puedes ponerle unos botines de protección muy útiles y que hacen que sus pezuñas queden aisladas del frío y todo lo que pueden coger debido a ello. En ambientes helados es muy conveniente pues el hielo le puede ocasionar heridas sangrantes y esto es peligroso para su salud.
Procura que siempre tenga un refugio cómodo, aislado del frío, que esté en buen estado, máxime si está en el exterior. El animal no puede pasar frío y por ello debe procurársele un entorno cómodo, amplio, impermeable, con elementos de calor -manta o colchón- así como que sea un refugio apto e idóneo para él. En caso de frío extremo es conveniente habilitar una zona aclimatada en el interior del hogar para la mascota.
La alimentación es importante y debe ser aquella que le ayude a tener la energía suficiente para elevar su temperatura corporal. Cuidado con la que no sea apta para él o tenga sucedáneos. En otoño o invierno tendrá menos actividad física por lo que es posible que tienda a engordar, cuidado con ello.
Con todo ello no olvides que es importante procurarle todos esos cuidados, que visite el veterinario con regularidad y que le des lo más importante: TU AMOR.