Sevilla se marida también con cócteles

La capital hispalense es una mezcla de costumbres, de religiones, de saberes y de sabores. Es cuna de tradiciones y de vanguardias, un escenario idílico para apostar por una oferta novedosa

22 jul 2018 / 23:37 h - Actualizado: 22 jul 2018 / 23:42 h.
"Gastronomía"
  • Mauricio Espejo muestra sus combinados con el menú degustación que los acompañará. / Jesús Barrera
    Mauricio Espejo muestra sus combinados con el menú degustación que los acompañará. / Jesús Barrera

Sevilla es la tierra de las tradiciones. De lo clásico. Amante de los momentos extraordinarios y celosa de sus costumbres. Sevilla tiene un sabor, un olor, un color que la distingue. Famosa por su ingenio, su creatividad y su buen humor, si hay algo que sabe, es vivir. Sevilla sabe saborear cada instante, cada motivo original que se le presenta, que paradógicamente coexiste con esa otra Sevilla de siempre. Pero en su delicado paladar también hay hueco para lo nuevo, lo diferente, lo que le revolucione las entrañas. Es cuna de oportunidades y de gourmets. Sí, de gourmets.

El paraíso de la tapa, de los boquerones adobaos de Blanco Cerrillo, las espinacas con garbanzos de El Rinconcillo, los caracoles de Casa Rufino o la ensaladilla de La Alicantina ha sabido convivir con el aterrizaje de los gastrobars, con los guiños a las técnicas más contemporáneas y con las exigencias de esa nueva oleada de fans de la cocina.

Así lo ha entendido la Taberna de Alabardero, cuna de nuevos fogones y visionaria de nuevas formas de hacer gastronomía. ¿Combinar cócteles con un sofisticado menú? Esa es la transgresión culinaria que nos ofrece esta casa. No es nuevo en España, pero sí está heredado de las apuestas más revolucionarias de capitales gastronómicas como Madrid y Barcelona.

Desde hoy y durante todo el verano, por 35 euros, la Taberna del Alabardero ha plantado cara a la contemporaneidad ofertando un menú de cinco platos maridados con cinco cócteles exclusivos, especialmente mimados y escogidos para provocar toda «una experiencia única», en palabras de Edmundo Hernández, gerente de la Taberna.

El éxito tremendo que vivió esta fórmula en el madrileño Café de Oriente hace un año, cuando Coca Cola presentó Royal Bliss, ha hecho que se lance aquí en Sevilla. «Como sabéis no somos un restaurante al uso, somos también una escuela de hostelería y estamos continuamente lanzando conceptos gastronómicos diferentes», como la apuesta por el año Murillo «en el plato», o el proyecto que tienen pensado para la Bienal, ocho tapas que representarán a cada una de las provincias y los palos del flamenco.

«La idea es presentar a amigos o clientes que incluso se puede comer con gin-tonics. Es novedosa, pero todo el mundo sale encantado y no tiene mucho alcohol. Se trata de degustar los platos y de probar toda la variedad que tenemos», expresa Mario Centeno, responsable de Coca Cola en Andalucía Occidental.

Una experiencia única

Pero, en ¿qué consiste esta oferta gastronómica? Mauricio Espejo, Brand Ambassador de Royal Bliss, aclara que los cócteles, que también tienen versión sin alcohol, se elaboran con una gama de mixers premiums que no son solo tónicas. «Son cócteles originales, pero a la gente les gusta. España es una tierra maravillosa de vinos, pero por qué no arriesgarse», propone. Mauricio quiso resaltar que es «muy importante después de comer no superar máximos de alcohol en sangre. Son 25 mililitros de alcohol en cada combinado, la idea es que no superen dos copas de vino», por lo que se ha trabajado de manera cómplice con el chef.

Para el cliente que decida acercarse a la calle Zaragoza a disfrutar de esta oportunidad única, nunca antes traída a Sevilla. «Hemos querido hacer una propuesta original, una propuesta diferente, en colaboración muy estrecha con el jefe de cocina de Taberna del Alabardero, desarrollar un menú muy completo para que la gente se lleve algo muy especial, no es solo comer, es tener una experiencia gastronómica, de sabores y de aromas. Hemos escogido cinco platos para combinar con cinco mixers premiums y sus destilados», desglosa Mauricio.

Como copa de bienvenida, el cliente degustará el cóctel Appletiser y Dewar’s White Label, un «mixer nuevo en la península pero que llevaba en Canarias 50 años, ideal para abrir boca». De entrante, con un Royal Bliss Creative Tonic Water y Beefeater 24 se saboreará una pipirrana con pulpo sobre gazpacho verde de cilantro y una ensalada de patata y judías verdes con caballa en escabeche, salsa de mango y huevas de trufa. De primer plato, Exotic Yuzu Sensation con Tanqueray Sevilla para un salmón a baja temperatura macerado en té verde y citronela, con tartar de aguacate, cebolleta y pimientos fritos. De segundo, Irreverent Ginger Ale con Cacique 500 para acompañar una presa ibérica con albaricoque asado, mojo verde de hierbabuena y salsa de oloroso. Y de postre, «algo muy de la tierra», un tocino de cielo de fruta de la pasión con sorbete de mandarina que irá bañado con Bohemiam Berry Sensation y vozka Absolut.