Sólo consumimos el 0,06% del total de plantas comestibles

En el mundo hay aproximadamente 300.000 plantas que pueden ser consumidas por el hombre, solo comemos alrededor de 200

11 ago 2015 / 11:55 h - Actualizado: 11 ago 2015 / 12:16 h.
  • Sólo consumimos el 0,06% del total de plantas comestibles

Los mercados son una verdadera explosión de colores y sabores. Pero por más variadas que nos puedan parecer al hacer la compra diaria en un supermercado, los productos disponibles solo representan una mínima fracción de las especies que podemos comer.

El hecho es que de las 400.000 especies de plantas que existen en el mundo cerca de 300.000 son comestibles. Y de estas, solo consumimos alrededor de 200, el dato no deja ser curioso y más aun si la mayoría de las proteínas que tomamos de las plantas provienen de tres cultivos: maíz, arroz y trigo.


¿Por qué nos alimentamos solo del 1% de las plantas comestibles?

«Hasta ahora, la explicación apuntaba a que lo hacíamos para evitar el consumo de plantas tóxicas», le explica a BBC Mundo John Warrer, profesor de botánica de la Universidad de Aberystwyth (Reino Unido) y autor del libro «La naturaleza de los cultivos». Sin embargo este argumento, dice, no tiene fundamento. «Muchas de las plantas que comemos son originalmente tóxicas, pero a lo largo del tiempo nosotros y otros animales hemos encontrado la forma de lidiar con estos componentes tóxicos».

Warren se refiere a los procesos de domesticación que fueron eliminando las sustancias venenosas en las plantas y a procedimientos más sencillos como la cocción que las hace digeribles. «En realidad, lo hacemos porque elegimos deliberadamente comer plantas que tienen una vida sexual muy aburrida».

Entiéndase por aburrida a una planta que se reproduce por un mecanismo de polinización muy generalizado, como puede ser el viento o los servicios de insectos comunes.

Los 10 más importantes

Aunque hay unas 20.000 especies de orquídeas y muchas podrían ser buenas como alimento, solo cultivamos una para el consumo (la orquídea de la vainilla, cuya polinización, que se hace manualmente, resulta viable debido a su alto valor de mercado). La razón por la que no las cultivamos, dice Warren, «es que tienen una vida sexual rara».

Para reproducirse, deben ser polinizadas por una especie específica de insecto, y tanto este como la orquídea dependen el uno del otro para su supervivencia. Si uno trata de cultivarlas lejos del hábitat de este insecto, no darán semillas y en última instancia fracasarán como cultivo.

Así, explica Warren, acabamos con «los 10 cultivos más importantes del planeta (maíz, trigo, arroz, papas, mandioca, soja, boniato, sorgo, ñame y plátano), que en su mayoría se polinizan con la ayuda del viento, sin necesidad de insectos».

¿Por qué consumimos el 0,06% del total de plantas comestibles?

«No obstante, si las abejas mueren, se verán afectadas las frutas -las manzanas, las peras, las fresas, por ejemplo- y eso perjudicará nuestra ingestión de vitaminas, la calidad de vida, y empeorará nuestra salud. Pero no nos vamos a morir de hambre», le dice Warren a BBC Mundo.

El botánico cree que es importante aumentar el número de especies que cultivamos, poniendo énfasis en aquellas que demandan menos recursos. «Tendimos a domesticar plantas muy nutritivas pero que necesitan muchos fertilizantes. Deberíamos cultivar nuevas plantas con sistemas nutritivos inferiores pero más sostenibles en el futuro», explica Warren.

Y a diferencia de nuestros ancestros, ahora que sabemos la dificultad de cultivar plantas de vida sexual compleja, podemos hacer cosas para superar estos obstáculos, añade.