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Las temperaturas alcanzadas en Sevilla estos días hacen que las mujeres que se visten de flamenca en la Feria aprovechen cualquier lugar a la sombra para descansar. En este caso, seis mujeres se reúnen en una caseta de Pacual Márquez . / J. P.
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Amigos comiendo en el Real. En la parte izquierda: Carlos Mesa, Abel Domínguez, Jesús Aguilar, Arturo Hidalgo y Eduardo Martín. En la parte derecha: Daniel Martín, J. Antonio Gallo, J. Fernando Robles, Antonio Caro y J. Manuel Roca. / J. P.
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En el número cuarenta de la calle Joselito el Gallo disfrutan de la Feria y de los toros. En la foto se encuentran, de izquierda a derecha, Ana Hernández, Isabel Borrero, Lucía Borrero, Pilar Sánchez-Arjona, Marita Jaraquemada y Mercedes Murube. / j. P.
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No todos van a la Feria a disfrutar de las sevillanas y el rebujito. Son muchas las personas a las que les toca trabajar. En este caso se puede ver al equipo de camareros de la caseta Los Doce Pajaritos, organizando las mesas antes de un duro día de trabajo. / j. P.
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Las altas temperaturas pasan factura en el recinto ferial. Las vestimentas de los cocheros no ayudan a sofocar este calor, por lo que muchos tienen que estar hidratándose permanentemente para evitar insolaciones y golpes de calor. / J. P.
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A ciertas horas pasear por la Feria es casi una temeridad. A la hora punta, los coches de caballos toman las calles del Real y que los peatones crucen es casi una aventura. Se echa de menos alguna señal que indique por dónde cruzar. / J. P.
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Este carruaje paseaba por la Feria de negro impoluto. Desde los cuatro caballos que tiran de él hasta la vestimenta del cochero están cuidadas al más mínimo detalle para ofrecer una imagen de solemnidad frente al colorido típico del Real. / J. P.
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Tres generaciones de caballistas se reúnen en esta foto. Abuelo, padre e hijo disfrutan de su pasión en familia. En la foto están conversando en la calle Joselito el Gallo, mientras esperan a que les traigan algo de bebida para calmar la sed. / J. P.
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Son muchas las familias que acuden a la Feria en coche de caballos, una tradición que se sigue manteniendo puesto que es una forma cómoda de llegar hasta el recinto ferial, ya que es el único vehículo que puede acceder. / J. P.
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De izquierda a derecha están J. Antonio Aparicio, Mº del Pilar Durán, Lola Guerrero, Magdalena Díaz - Albo, Francisco Padilla, David Gallego y Manuel Herrán. Pedro Barco (padre e hijo), Antonio Brea, Ángela Jaén, Roberto Arias y Ángel Buzón . / J. P.
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Estos compañeros se reunieron en la calle Pacual Márquez. En la foto, de izquierda a derecha se encuentran Marcos Gregores, Miguel Ángel Morales, José Manuel Ríos, Berta de Cárdenas, Noelia Rey, Belén Busatori y Daniel Coronado. / J. P.
Las temperaturas alcanzadas en Sevilla estos días hacen que las mujeres que se visten de flamenca en la Feria aprovechen cualquier lugar a la sombra para descansar. En este caso, seis mujeres se reúnen en una caseta de Pacual Márquez . / J. P.
Amigos comiendo en el Real. En la parte izquierda: Carlos Mesa, Abel Domínguez, Jesús Aguilar, Arturo Hidalgo y Eduardo Martín. En la parte derecha: Daniel Martín, J. Antonio Gallo, J. Fernando Robles, Antonio Caro y J. Manuel Roca. / J. P.
En el número cuarenta de la calle Joselito el Gallo disfrutan de la Feria y de los toros. En la foto se encuentran, de izquierda a derecha, Ana Hernández, Isabel Borrero, Lucía Borrero, Pilar Sánchez-Arjona, Marita Jaraquemada y Mercedes Murube. / j. P.
No todos van a la Feria a disfrutar de las sevillanas y el rebujito. Son muchas las personas a las que les toca trabajar. En este caso se puede ver al equipo de camareros de la caseta Los Doce Pajaritos, organizando las mesas antes de un duro día de trabajo. / j. P.
Las altas temperaturas pasan factura en el recinto ferial. Las vestimentas de los cocheros no ayudan a sofocar este calor, por lo que muchos tienen que estar hidratándose permanentemente para evitar insolaciones y golpes de calor. / J. P.
A ciertas horas pasear por la Feria es casi una temeridad. A la hora punta, los coches de caballos toman las calles del Real y que los peatones crucen es casi una aventura. Se echa de menos alguna señal que indique por dónde cruzar. / J. P.
Este carruaje paseaba por la Feria de negro impoluto. Desde los cuatro caballos que tiran de él hasta la vestimenta del cochero están cuidadas al más mínimo detalle para ofrecer una imagen de solemnidad frente al colorido típico del Real. / J. P.
Tres generaciones de caballistas se reúnen en esta foto. Abuelo, padre e hijo disfrutan de su pasión en familia. En la foto están conversando en la calle Joselito el Gallo, mientras esperan a que les traigan algo de bebida para calmar la sed. / J. P.
Son muchas las familias que acuden a la Feria en coche de caballos, una tradición que se sigue manteniendo puesto que es una forma cómoda de llegar hasta el recinto ferial, ya que es el único vehículo que puede acceder. / J. P.
De izquierda a derecha están J. Antonio Aparicio, Mº del Pilar Durán, Lola Guerrero, Magdalena Díaz - Albo, Francisco Padilla, David Gallego y Manuel Herrán. Pedro Barco (padre e hijo), Antonio Brea, Ángela Jaén, Roberto Arias y Ángel Buzón . / J. P.
Estos compañeros se reunieron en la calle Pacual Márquez. En la foto, de izquierda a derecha se encuentran Marcos Gregores, Miguel Ángel Morales, José Manuel Ríos, Berta de Cárdenas, Noelia Rey, Belén Busatori y Daniel Coronado. / J. P.
