Las obras permitirán la conexión con Endesa de las zonas correspondientes a los planes parciales R-2 y R-3. / Juan C. Romero
El Ayuntamiento de Burguillos ha reanudado las obras para terminar de regularizar el suministro eléctrico de una zona de 700 viviendas del término municipal. Los trabajos suponen una inversión cercana a los 700.000 euros y se centran en esta fase en adaptar la infraestructura de la línea de baja tensión a las exigencias de la normativa vigente para permitir el enganche de 500 viviendas, a lo largo de tres barriadas comprendidas en los planes parciales R-2 y R-3, a la red de Endesa. Según las estimaciones municipales, a finales de septiembre, a medida que avancen los trabajos, irán conectándose a la red de eléctrica y desenganchándose de la luz de obra y de los generadores de gasoil con los que se han venido abasteciendo desde que llegasen los primeros vecinos a finales de 2007.
La situación deviene, según ha explicado el alcalde, Domingo Delgado (PP), de la negativa de Endesa a recepcionar la línea de baja y media tensión instalada en esta zona por el promotor, al no adaptarse a la exigencia de la normativa vigente, lo cuál no impidió que el anterior equipo de Gobierno recepcionase las obras y otorgase licencias de primera ocupación.
«Endesa no presta servicio hasta que la línea de baja tensión no reúna todos los requisitos», ha indicado el primer edil, quien ha lamentado que «lo que podían haber sido unos ingresos para el Ayuntamiento de Burguillos al recepcionar la zona «han supuesto una merma para las arcas municipales aproximada de 4,8 millones de euros», una cantidad de dinero a la que la administración municipal ha tenido que hacer frente para el abono del gasoil de los generadores de energía, para pagar la demanda de Endesa por el suministro de la luz de obra atrasado de estas viviendas, que hasta julio de 2013 no pagaban los vecinos, y para acometer las obras necesarias que permitan la recepción de la infraestructura por parte de Endesa y el enganche de las 500 viviendas que aún restan.
Los trabajos para adaptar la infraestructura los inició el anterior equipo de Gobierno, logrando la regularización de 200 viviendas en una primera fase. Delgado ha afirmado que ahora con el avance de estas obras «se salda después de tantos años una deuda con los vecinos, a los que se les prometió que su situación estaría solucionada en 15 o 20 días», y confía en que los trabajos estén listos entre los meses de septiembre y octubre de este año.
El regidor ha defendido la decisión que el Ayuntamiento tomó en julio de 2013 para establecer un precio público como contraprestación por el suministro de electricidad que proporcionaban a estas tres barriadas: «La Justicia dijo que dar suministro de luz a viviendas sin recibir una contraprestación económica es un delito de malversación de caudales públicos, y por esto ha procesado al anterior alcalde, José Juan López (PSOE), por tanto debemos acatar la ley».
En este sentido, Delgado ha indicado que «el resto del pueblo no comprendía que con el dinero de todos se abonase la electricidad de una serie de barriadas», y asegura que la decisión ha supuesto que la medida de consumo pasase «de 1.400kw por vivienda a los casi 300kw actuales, poniendo fin a situaciones de abuso entre los vecinos».
Rosa María Reina, una de las primeras vecinas que llegaron a las viviendas afectadas se ha mostrado satisfecha por las obras que la semana próxima permitirán el enganche de su vivienda a la red de Endesa. «Primero empezamos enganchados a la luz de obra, y luego con generadores» ha indicado esta vecina, que ha valorado que los cortes de suministro se debían también al «abuso» de algunos vecinos, cuando no se pagaba la luz, un suministro que hasta ahora abonan al Ayuntamiento, y este a su vez a la compañía eléctrica.
