Al menos 15 insurgentes murieron en combates con las fuerzas de seguridad librados en una región tribal paquistaní, fronteriza con Afganistán, informó a Efe una fuente militar. Un portavoz del Ejército, el teniente coronel Basir Haider, explicó que las fuerzas paramilitares se enfrentaron "a miembros de la insurgencia talibán" en diversos distritos septentrionales de la demarcación tribal de Mohmand, situada en el noroeste del país.
"Hubo ofensivas por tierra, pero también por aire", agregó Haider, quien detalló que las fuerzas de seguridad están avanzando por las zonas de Pandiali, Lakara y Safi, donde están atacando los refugios y escondites de los integristas. "La operación aún debe continuar durante un tiempo. Todavía no se han alcanzado los objetivos", añadió la fuente, que no pudo ofrecer una cifra de víctimas oficial desde el inicio de la ofensiva hace dos semanas.
Según los datos recogidos por Efe, en esta operación casi dos centenares de insurgentes y 19 paramilitares han muerto en los choques registrados en Mohmand.
A finales de 2008, las autoridades de Pakistán decidieron extender a Mohmand la ofensiva militar que habían lanzado en verano en la vecina región de Bajaur, donde las fuerzas de seguridad han librado intensos combates con la insurgencia talibán y aseguran haber acabado con la vida de casi un millar de integristas.
Las áreas tribales fronterizas con Afganistán, un territorio que nunca ha estado bajo completo dominio del Estado, son refugio de numerosos grupos talibanes y miembros de la red terrorista internacional Al Qaeda.
Según un informe publicado recientemente por un grupo paquistaní de estudios geopolíticos, casi 8.000 personas murieron el año pasado a causa de la violencia en Pakistán, la mayoría, más de 3.000, en operaciones militares y ataques insurgentes.
