Andalucía registró el pasado año 33 episodios racistas y xenófobos, lo que la convierte en la tercera comunidad autónoma, por detrás de la Comunidad Valenciana, con 79 sucesos, y Madrid, con 49, en la que ocurrieron más casos de esta naturaleza, según el Informe Raxen 2010.
El informe, que fue presentado en Madrid por el presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, junto al Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, desvela que durante el pasado año ocurrieron en Andalucía tres casos de violencia ultra -dos de ellos en el fútbol-, un caso de islamofobia, tres de discriminación, dos episodios de amenazas nazis y xenófobas, dos de violencia xenófoba, uno de abuso policial y un crimen racista. También se dio un suceso de violencia transfóbica, dos casos de xenobofobia y dos de neonazis, un caso de pintadas racistas en centros escolares y otro de pintadas neonazis, una agresión homófoba, un episodio de neofacismo xenófobo, un suceso de violencia neonazi, informa Europa Press. El Informe Raxen expone la radiografía de la nueva extrema derecha destacando el crecimiento de la actitudes xenófobas e intolerantes a causa de la crisis económica. Afirma que "existen grupos organizados que alimentan el odio a la inmigración con consignas como los españoles primero, así como la islamofobia y antisemitismo".
En el caso de Andalucía destacan casos como el crimen racista que tuvo lugar el 28 de febrero de 2009 en Lepe (Huelva), por el cual murió un ciudadano argelino, Bernabá Laardj, de 40 años, tras ser agredido por al menos tres personas que profirieron contra él gritos "racista y xenófobos", según cuentan los testigos. O los panfletos que distribuyeron en la ceremonia de La Toma de Granada, comparando el Islam con el terrorismo.
