Agentes de la Guardia Civil de Lora del Río (Sevilla) han detenido a tres mujeres y una menor de edad, que ha quedado en libertad, todas ellas pertenecientes a la misma familia, por los supuestos delitos de lesiones y quebrantamiento de condena, pues supuestamente habrían apaleado a un hombre de 63 años de edad en esta localidad sevillana.
Según relató en la denuncia la esposa de la víctima, todo sucedió cuando se encontraba en su coche, en compañía de su marido e hija, en una calle del municipio. Al parar en un semáforo en rojo, observaron que, de un coche que se encontraba también parado, se apeaban varias mujeres a las que conocían y que les increparon.
En un comunicado, el Instituto Armado informó de que, tras apearse también su marido del coche, una de las mujeres que se encontraba en el otro vehículo se dirigió a él esgrimiendo un palo y le golpeó en la cabeza. Tanto su mujer como su hija acudieron en su auxilio, pero las supuestas agresoras, armadas con palos y una barra de hierro, continuaron agrediendo a la víctima, que cayó al suelo con la cabeza ensangrentada.
Tras ello, un policía local de Lora del Río auxilió a esta persona y lo trasladó a un hospital de Sevilla, donde fue atendido de diferentes lesiones. La Guardia Civil de Lora del Río inició sus pesquisas, consultó sus archivos y llegó a comprobar que no es la primera vez que estas dos familias se enfrentaban.
Como consecuencia de sus disputas, meses atrás incendiaron el vehículo de uno de los miembros de la familia agredida. Debido a estos problemas, las agresoras tenían en vigor una orden de alejamiento de la familia que presentó esta denuncia.
Una vez que los agentes recabaron pruebas e interrogaron a los posibles testigos de los hechos denunciados, se comprobó la veracidad de los mismos, por lo que la Benemérita procedió a detener a las presuntas agresoras.
Se trata de S.F.E., A.E.R. y M.E.R., todas vecinas de Lora del Río, así como de la hija de una de ellas, menor de edad, que fue puesta en libertad bajo custodia de sus responsables legales. A todas se les imputan supuestos delitos de lesiones y otro de quebrantamiento de condena, al no respetar las medidas cautelares de alejamiento a las que estaban sometidas.
