El Betis, una vez aprobado su convenio de acreedores, ya sabe que la porción de presupuesto que destinará a los fichajes no variará demasiado, por no decir nada, respecto al dinero que les dedicó en la temporada 2011-12. En principio son unos 20 millones de euros tanto para la contratación de refuerzos como para el pago de los salarios de la primera plantilla. Pero hay otras vías para incrementar los fondos y el club verdiblanco las está estudiando muy seriamente. Es lo que en La Palmera definen como "fórmulas imaginativas".
La "fórmula imaginativa" más de moda es la de los fondos de inversión. Se trata de grupos, o personas, que prestan dinero o directamente futbolistas cuyos derechos han adquirido. Por ejemplo, es lo que hizo el Sevilla para fichar a Babá y el Zaragoza para quedarse con el guardameta Roberto. La contrapartida, obviamente, es que el mismo fondo de inversión que te da un futbolista te lo puede quitar en cualquier momento.
Si el Betis se decide por adoptar esta fórmula, y la verdad es que varios fondos ya se han dirigido al club de Heliópolis para establecer alianzas, tendrá que darse prisa, ya que los organismos que rigen el fútbol mundial no están por la labor de permitir estas prácticas. La UEFA, de hecho, ya ha dejado caer que prohibirá la propiedad compartida de jugadores. En Inglaterra, por ejemplo, no se autoriza la compra de futbolistas a través de fondos de inversión. En el Betis, de momento, sólo es una posibilidad más.
