Fernando Casas y Manuel Domínguez Platas dirigirán la junta del 9 de diciembre / José Luis Montero
El Betis ha publicado hoy las cuentas del ejercicio 2013-14, que someterá a la aprobación de sus accionistas en la junta del próximo 9 de diciembre. Al revés que en el capítulo deportivo, el ejercicio económico se saldó con un balance muy favorable para el club verdiblanco, que redujo su deuda en más de 30 millones de euros. De hecho, su patrimonio vuelve a dar positivo después de años en negativo.
La evolución de las cuentas del Betis es tan buena que el club zanjará su deuda con el principal de sus acreedores, Hacienda, a lo largo de 2015. Si consigue ascender a Primera, lo hará en agosto. Si se queda en Segunda, será en diciembre. Por tanto, puede ser el primer club del fútbol español en saldar su deuda con la Agencia Tributaria.
La deuda, además, también ha experimentado una drástica reducción en el último año fiscal. La concursal, por ejemplo, se encuentra ahora en unos 20 millones de euros cuando en 2013 estaba en 44,6 millones. Y hay más, ya que el balance se cerró el 30 de junio, pero desde entonces ha habido más pagos a acreedores y el cálculo del consejo de administración es que la deuda rondará los 17 millones a finales de este año.
En cuanto al patrimonio neto, ahora mismo está en 1,61 millones de euros. En 2010, cuando entró en concurso de acreedores, estaba en -63 millones. En la actualidad, el Betis puede cubrir su deuda con sus activos, algo que hacía años que no ocurría en la balanza verdiblanca.
Las cuentas del Betis también reflejan un beneficio contable de 19,81 millones de euros después de impuestos. La mayoría, unos 15 millones, obedecen a créditos peleados en los tribunales, es decir, deuda no pagada. El superávit de la gestión corriente del club es de unos 4 millones.
EUROPA DEJÓ MÁS DE 6 MILLONES Y PAGÓ A N'DIAYE, BAPTISTAO Y SARA Esa, 4 millones, es precisamente la cantidad aproximada de que dispuso el Betis en el pasado mercado invernal de fichajes. El origen de ese dinero hay que buscarlo en la Liga Europa, que dejó unos 6,5 millones de euros brutos de beneficio a la entidad verdiblanca. Con el neto que quedó, el Betis pagó las cesiones de N'Diaye, Baptistao y Sara, así como las indemnizaciones de Pepe Mel y Juan Carlos Garrido.
El club no adelanta la cantidad de que dispondrá el próximo enero, pero liquidez hay para afrontar las operaciones que sean necesarias.
