El Ayuntamiento presentó ayer su plan de austeridad para el periodo 2010-2012 con el que pretende ahorrar algo más de ocho millones de euros sólo con el recorte de los salarios a los funcionarios y al personal laboral. La medida, que se ha tomado tras la aprobación del Decreto dictado por el Gobierno estatal para reducir el déficit de las administraciones locales, no afectará al personal de las empresas municipales.
Según explicó en rueda de prensa la delegada de Hacienda, Nieves Hernández, el Gobierno municipal ha decidido recortar los sueldos a sus funcionarios, por lo que calcula que se va a ahorrar 8.168.579,03 euros anuales. Los recortes se aplicarán en función de las categorías labores, con lo que oscilarán entre un 0,6% y un 10,55%. Esto supone que los funcionarios con los sueldos más altos perderán 6.500 euros brutos anuales y los que menos 18,28 euros brutos al año. Como ejemplo, Hernández puso el sueldo de un peón que viene a ser de unos 1.626 euros brutos al mes, con lo que perderían 81,03 euros a partir del mes de junio, que es cuando se va a comenzar a aplicar la medida. Los empleados de empresas municipales, como Tussam o Lipasam, no se verán afectados, ya que ellos cuentan con su propio convenio colectivo.
La edil explicó que el recorte de salarios del alcalde, que sería de un 9%, y de los altos cargos municipales acordada el martes por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) aún no está claro cómo afectará al Ayuntamiento, pues se está estudiando cómo se va a aplicar, ya que el Gobierno municipal lo "suscribe totalmente". Por ello, Hernández dijo que lo anunciarán públicamente en breve.
La responsable de Hacienda recalcó que esta medida se enmarca dentro de un plan que pretende lograr un descenso del gasto en 2010 de 6,5 millones y que en 2012 el superávit de las arcas municipales sea de 8,3 millones de euros gracias a reducciones de gastos, como el que se va realizar en locomoción que asciende a un 59% y que, en cambio, "no afectarán a otros capítulos como prestaciones básicas". De esta forma, de aquí a 2012 el gasto municipal se prevé que se reducirá en 200 millones.
Para ello, Hacienda ha calculado que será necesario incrementar los ingresos de la Agencia Tributaria municipal con planes que permitan luchar de forma más eficaz contra el fraude fiscal. Sin embargo, la revisión catastral anunciada para 2011 no se va a llevar a cabo, con lo que "el recargo del 10% no va entrar en vigor al menos hasta 2012", señaló Hernández, quien ha destacado la importancia de esta medida para los ciudadanos y el esfuerzo que supone para las arcas.
Este plan, que se aprobará en el pleno del lunes convocado para aprobar los presupuestos municipales de 2010, supondrá según la concejal "lograr el equilibrio de las cuentas municipales". Hernández lanzó un "mensaje de tranquilidad" porque el Ayuntamiento "no tiene problemas de liquidez para pagar las nóminas" y garantizó la prestación de todos los servicios públicos.
Según la concejal de Hacienda, el Ayuntamiento "ya tenía los deberes hechos" antes de la publicación del decreto, asegurando que el nivel de endeudamiento (522 millones) supone un 89,83%, cuando el límite está fijado en el 120%. "La deuda se ha reducido por tercer año consecutivo", dijo la edil, quien aseguró que, pese a las medidas de contención y ahorro, "se va a cerrar un ciclo inversor sin precedentes".
Los funcionarios harán protestas
El Comité de Empresa y la Junta de Personal Funcionario del Ayuntamiento ha convocado para las 12.00 horas del miércoles una manifestación que partirá desde la Puerta de Jerez hacia la plaza Nueva con motivo de la reducción anunciada ayer por el Consistorio.
El presidente del comité de empresa y secretario general de CCOO en el Ayuntamiento, Manuel Gutiérrez, subrayó a Europa Press que su sindicato ha convocado una ronda de asambleas con los servicios municipales informando de las medidas aprobadas y las repercusiones “no sólo en los trabajadores, sino en el tejido social que menos recursos tiene, como dependientes y pensionistas”.
De esta forma, la movilización del 2 de junio se enmarca dentro de las medidas que los sindicatos van a tomar para “protestar y que se entienda que tomamos medidas contundentes en contra del decreto”. Será así un acto de protesta previo a la huelga general “donde queremos que participen todos los trabajadores del Ayuntamiento”. “Este decreto es un atentado en contra de la negociación colectiva, porque ya se habían negociado a nivel estatal acuerdos de mejora y de alguna manera se pueden perder conquistas que hemos ganado a través de la presión”, recalcó Gutiérrez.
La manifestación se ha convocado en la plaza Nueva y no en la Delegación del Gobierno “porque queremos reivindicar que estamos en contra del tijeretazo y de la situación crítica en los servicios del Ayuntamiento, en algunos de los cuales, como la limpieza de colegios, se lleva un mes sin recursos materiales”, señaló.
