Local

El Convento de las Teresas entra en el Catálogo General de Patrimonio Histórico de la Junta

La Junta de Andalucía ha declarado Monumento este edificio del siglo XVII. En su interior se conservan pinturas murales y retablos con obras de Herrera El Viejo y Juan de Mesa.

el 06 jul 2010 / 15:28 h.

TAGS:

Patio del Convento de las Teresas.

El Consejo de Gobierno ha aprobado esta martes inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, con la tipología de Monumento, el Convento de San José del Carmen, conocido popularmente como Las Teresas y situado en el Barrio de Santa Cruz de Sevilla.

Este cenobio de la Orden de las Carmelitas Descalzas fue fundado por Santa Teresa de Jesús durante su estancia en la ciudad y en 1576 se ubicó en su actual sede de la calle Santa Cruz. El conjunto es el resultado de sucesivas reformas e incorporaciones de casas colindantes al edificio original (un palacio renacentista organizado en torno a un patio), con una gran diversidad de estilos.

El monumento presenta dos zonas diferenciadas: las dependencias conventuales y la iglesia. Las primeras destacan por su calidad ornamental, patente sobre todo en los artesonados mudéjares, la azulejería y las celosías góticas. Entre ellas se cuentan el claustro o antiguo patio del palacio renacentista, el refectorio, el locutorio, la biblioteca y el oratorio de la Santa Madre.

La iglesia, cuya construcción finalizó entre 1615 y 1618, refleja un estilo de transición del Manierismo al Barroco, en un contexto de arquitectura sobria posterior al Concilio de Trento y en conexión con los preceptos de austeridad de la orden carmelita reformada.

De planta rectangular, presenta una sola nave cubierta con bóveda de cañón y una capilla mayor cuadrada con bóveda semiesférica. La portada, situada a los pies de la nave, incluye un alero a modo de entablamento clásico, que cubre la puerta y contiene pinturas murales. Junto al muro de la Epístola y sobre la sacristía, se levanta una espadaña de estilo manierista, con dos cuerpos, dos vanos y dos campanas.

El valor patrimonial del templo fue enriquecido posteriormente con pinturas mura-les y retablos, que se conservan íntegramente en la actualidad. Las primeras, de época barroca, se concentran en la capilla mayor, cuya decoración conjuga lienzos embutidos en marcos de yeserías con pinturas sobre la pared de motivos vegetales o alusivos a la Pasión. Los retablos, manieristas y barrocos, incluyen obras de pintores como Herrera 'El Viejo' o Luis de Morales y escultores como Juan de Mesa o Juan Bautista Vázquez.

El resto de los bienes muebles corresponde a las dependencias conventuales, donde se conservan más de un millar de obras de arte entre pinturas, esculturas, altares, muebles, textiles, piezas de orfebrería y documentos, además de prendas y objetos personales de Santa Teresa de Jesús, que acrecienta su valor patrimonial. En este legado se incluye su libro autógrafo 'Las Moradas', escrito en 1577.

  • 1