Menú
Local

El jurado halla culpable por unanimidad a Antonio Gordillo del asesinato de Laura Cerna

El fiscal y las acusaciones han tenido que rebajar la pena a 20 años al no apreciarse la agravante de ensañamiento

el 19 abr 2012 / 12:56 h.

TAGS:

Culpable de asesinato. Ese es el veredicto emitido hoy por el jurado popular que ha juzgado esta semana a Antonio Gordillo, el acusado de matar y descuartizar a Laura Cerna. El jurado, en cambio, no ha apreciado la agravante de ensañamiento ni el delito de profanación de cadáver, lo que ha obligado al fiscal y a las acusaciones particulares a rebajar la pena que solicitan de 25 a 20 años. Tampoco han considerado probado la existencia de atenuantes para rebajarle la condena como la enajenación mental. Al final de la vista, la familia de Laura se dirigió a Gordillo con un retrato de Laura.

El jurado, cuyo veredicto se hizo público cerca de las 14.30 horas, consideró probado por unanimidad que Antonio Gordillo asestó un "fuerte golpe" a Laura, que quedó inconsciente u obnubilada. A continuación se la llevó hasta el baño, donde le "asestó cuatro puñaladas con tanta fuerza que rompieron cartílagos y costillas". Unas cuchilladas que fueron "causadas con la intención de matarla". Posteriormente, la decapitaría y la cortaría un brazo para poder meter el cuerpo en una maleta y el resto de sus miembros en una bolsa.

Según el jurado, todos estos hechos los cometió Gordillo estando Laura "sin posibilidad de defensa", pero no creen que la descuartizara con la intención de "faltar al respeto" al cadáver, por lo que no consideran probado el delito de profanación de cadáver. En cuanto a los hechos que no consideran probados, el jurado estimó que no ha quedado probado que el acusado "aumentara el dolor deliberadamente", ya que las puñaladas se dirigieron todas al corazón, por lo que descartan el ensañamiento. Asimismo, descartaron toda posible eximente para el acusado, como la drogadicción, el que actuara bajo los efectos del alcohol o por obcecación; y que el procesado colaborara con la Policía, pues considera que en lo único que ayudó fue a localizar el cadáver.

Con el veredicto hecho público, al Ministerio Fiscal no le quedó más remedio que rebajar en cinco años su petición de pena, de 25 a 20 años, ya que se ha descartado la agravante de ensañamiento. Al eliminarse ésta, la pena podría oscilar entre 15 y 20 años, pero el fiscal, Luis Carlos Rodríguez León, pidió la máxima porque "el asesinato de Laura no es normal. La actitud inhumana, la saña y el daño deliberado fue más allá del necesario para acabar con una persona". "Su conducta debe ser condenada con una sentencia ejemplar", dijo.

El abogado que representa a la familia de Laura, José Estanislao López, también tuvo que rebajar su petición a 20 años, por los mismos motivos que el fiscal. El abogado de los padres de Laura también solicitó la pena más alta que podía para los que calificó como "un asesinato brutal, feroz, execrable, que se ha salido por completo de la crónica negra española". El abogado que representa al marido de la víctima, Marcos Cañadas, se adhirió a lo manifestado por el Ministerio Público y dijo que los 20 años le deben ser impuestos por "un principio de humanidad".

Por último, el abogado que defiende a Gordillo, Sebastián Polo, reclamó el mínimo legal , solicitando una pena "no superior a 15 años" y, en cuanto a las indemnizaciones, "el mínimo que estime el magistrado". Todas las partes, anunciaron posibles recursos ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para aumentar la pena o, en el caso de la defensa, conseguir la absolución.

Con esta intervención el magistrado daba por terminado el juicio que quedó visto para sentencia, momento en el que se vivieron momentos de tensión, pues la familia de Laura no pudo contener más la emoción tras tantos días de juicios y se dirigió al asesino mostrándoles una foto de ella e insultándolo. "Mírala a la cara, asesino, animal, monstruo", le dijo Sandra Cerna colocándose ante Antonio Gordillo cuando éste iba a ser sacado de la Sala. La reacción del acusado fue agachar la cabeza, darse la vuelta y sentarse de nuevo, tras lo que Sandra Cerna le gritó "cobarde, mírala". El hermano de Laura, Thomas Cerna, también se dirigió a él en inglés diciéndole "asesino, estás maldito", mientras el hijo de Laura, Micchel Curtis, le propinó diversos insultos.

La madre de Laura criticó de nuevo "las leyes de este país, que son un insulto para la vergüenza humana".


  • 1