El Parlamento andaluz aprobó ayer el plan de ajustes que el presidente José Antonio Griñán había presentado un día antes en la Cámara. La mayoría absoluta del PSOE (56 de 109 diputados) permitió que las medidas salieran sin problemas pese a contar con el rechazo de la oposición. Bueno, con el voto en contra de IU porque el PP avisó de que "no se iba a molestar" en votar.
No pulsó ni el botón del no ni el de la abstención. El motivo: los populares dejaron ayer al margen el tono constructivo con el que su líder, Javier Arenas, dijo acudir al debate, para cambiarlo por un duro ataque a las medidas presentadas por la Junta. Hasta exigieron que se repitiera el debate.Los socialistas lo vieron claro, a su juicio el PP quería otra oportunidad porque su claro ganador en el cuerpo a cuerpo fue Griñán.
La gran pelea se centró en la subida de impuestos que prepara el Gobierno. Si un día antes Arenas pasó de puntillas sobre ese anuncio, en el cierre del debate el PP montó en cólera. La portavoz parlamentaria, Esperanza Oña, denunció "el fraude del impuestazo del señor Griñán". La bronca se centró en el desglose de las medidas fiscales. En un primer momento, la Junta anunció que iba a imponer límites de renta (hasta 24.000 euros) para las deducciones que se aplican por compra de VPO, adopción internacional o familias monoparentales. Con lo que afectaría a más de 35.000 familias de renta media. Poco después la Junta rectificó y aseguró que cualquier límite serán las rentas por encima de los 80.000 euros.
En mitad de ese embrollo, el PP dijo sentirse víctima de "un auténtico engaño" al Parlamento sin precedentes. "Griñán se puso en escena como Robin Hood y es el insaciable Rey Juan, que quita el trigo a los pobres", apuntó Oña. Hasta tal punto llegó que aseguró que "el PP exige que se repita el pleno, esta vez de verdad". Los populares denunciaron que la subida de impuestos afecta "al 100% de ahorradores y consumidores.
La consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, explicitó otros datos del plan por el que la Junta espera ahorrar 1.583 millones de euros este año. Los ingresos tributarios de la Junta se incrementarán en unos 350 millones de euros, estimó, cuando los nuevos impuestos se apliquen en su totalidad.
En cuanto a la reordenación del sector público, la Junta anticipó que la reducción de esos 110 entes instrumentales supondrán la amortización a largo plazo de 180 puestos directivos y un ahorro de 100 millones de euros. 160 coches oficiales, aproximadamente, saldrán de la flota de la Junta.
El portavoz socialista, Mario Jiménez, aseguró que Griñán estuvo "a la altura de las circunstancias", mientras que el PP-A ha demostrado ser "el partido del no" y ha perdido una "oportunidad de oro" para mostrar su "supuesto compromiso" con esta tierra. Griñán no tiene miedo a tomar decisiones "valientes, solidarias, justas, necesarias, responsables y equilibradas".
