El PP retrocedió ayer en sus amenazas de abandonar la FEMP. Los populares advirtieron de que si el presidente, Pedro Castro, no dimitía, se marcharían de la federación. Castro no renunció, pero los populares sólo se irán de los órganos que él dirija.
Ayer se celebró la sesión extraordinaria de la Comisión Ejecutiva de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y Pedro Castro no dejó su cargo, como el PP había exigido tras sus polémicas palabras sobre los votantes de la derecha, a los que llamó "tontos de los cojones".
Al término de la reunión, el presidente de la FEMP, en un tono visiblemente emocionado, señaló que mayoritariamente la Ejecutiva de la federación aceptó sus explicaciones y que recibió de ellos un "respaldo mayoritario" por sus "desafortunadas declaraciones". Castro, lejos de anunciar su renuncia, se comprometió a continuar en la presidencia de la federación para seguir afrontando todos los retos pendientes. También al término de la sesión extraordinaria, el portavoz del PP en la FEMP, Fernando Martínez Maíllo, informó de que su partido no asistirá a ningún acto público ni rueda de prensa que presida Castro, ni participará en ninguna delegación extranjera o interlocución institucional en la que esté presente el actual dirigente de la FEMP. "La normalidad volverá a la Federación el día que Pedro Castro no sea presidente", dijo Maíllo, quien subrayó que "el problema no es la FEMP, el problema es Pedro Castro".
Señaló que ésa era la posición del partido, de los alcaldes del PP representados en la Comisión Ejecutiva, de los presidentes de Diputación y de la dirección nacional del PP. "Y espero que sea aceptada". El portavoz del PP avanzó que espera que esta situa- ción sea transitoria, ya que "compromete al actual presidente que está poniendo en dificultades a la institución y la debilita".
Para Castro éste es, precisamente, un momento en el que no conviene que el presidente dimita. "El municipalismo se encuentra en un momento de máxima importancia", aseveró Castro, debido a que todavía se ha de concretar cómo se proyectará el fondo de 8.000 millones de euros que el Gobierno ha destinado a los consistorios con el fin de generar empleo.
Un hombre "apenado". "Me siento profundamente apenado por ser el autor de estas palabras que de ningún modo expresan el respeto que a lo largo de toda mi vida política he tenido y tengo hacia los valores democráticos, el pluralismo y la consideración hacia todas las opciones políticas", concluyó Castro.
Por su parte, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, aseguró que su partido mantiene una postura "clara y única", en un intento por despejar la duda sobre si hay discrepancias internas en el seno del partido en cuanto a qué hacer en la FEMP. Sin embargo, en este sentido Efe informó ayer de que un sector del PP de Madrid considera que el partido debería haber aceptado las disculpas ofrecidas por el presidente de la FEMP y no haber abandonado varios órganos de representación de esa entidad que agrupa a los más de 8.000 municipios españoles.
