Acabar con El Vacie es el objetivo del Ayuntamiento, pero el camino es largo. Mientras, a corto plazo, la meta es dignificar el poblado y en esa línea se dio ayer otro importante paso: las máquinas han comenzado a instalar las tuberías de agua potable y los 47 módulos con duchas y sanitarios para las familias.
Según informó Ángel Montoya, portavoz de los vecinos del poblado, una cuadrilla de 20 trabajadores de la empresa municipal de aguas, Emasesa, y la constructora Martín Casillas, comenzó ayer a levantar el suelo de la zona para instalar tuberías de agua potable y crear los módulos con duchas y sanitarios, 47 instalaciones para las 225 familias que residen actualmente en el núcleo chabolista -unas 830 familias en total-. Los trabajos tienen una duración aproximada de un mes y suponen el primer paso en firme en la aplicación del plan para la erradicación de las infraviviendas.
El proyecto, dotado con 3,4 millones de euros que invierte la Junta a través de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA), se había limitado hasta ahora a la limpieza del asentamiento por parte de la empresa municipal Lipasam y al allanamiento del terreno para permitir la entrada de maquinaria pesada. Por ello, Montoya destaca la "importancia" de los trabajos de canalización de agua y de mejora de las condiciones higiénicas, "porque al fin supone una obra de verdad, de peso, y deja ver que la promesa de los políticos empieza a cumplirse". "Muchos vecinos se han levantado temprano para ver la llegada de las máquinas, nos encontramos como niños con zapatos nuevos. El agua es para nosotros un primer signo de que podemos ganar en dignidad", añade el portavoz de los vecinos.
El plazo de ejecución, sostiene, eso sí, "podía ser más rápido, porque hablamos de unas infraestructuras muy necesarias sobre todo para los niños", pero se conforma con esperar un mes. "Preferimos tener cosas bien hechas, aunque haya que esperar un poco", matiza.
Desde el Consistorio recordaron ayer que estos trabajos son la primera fase de la "mejora integral" del poblado, que incluye la reparación de las chabolas y la creación de una guardería y dos módulos para que los técnicos municipales trabajen con los vecinos. El plan destaca porque incluye el realojo de los actuales residentes de El Vacie en otros barrios de la ciudad. Bienestar Social ha baremado ya cien solicitudes de vivienda.
