El Ayuntamiento de La Algaba ha puesto en marcha un proyecto de capturación y esterilización de gatos callejeros para evitar que se sigan proliferando en el barrio Almenara del Guadalquivir y dar así respuesta a las demandas de vecinos, que en los últimos meses criticaban la presencia masificada de estos animales. Las quejas de los vecinos de dicho barrio alertaban de un crecimiento «desmesurado» de una colonia de gatos. Según el concejal de Medio Ambiente, David Rodríguez, el principal motivo era el «descontrol» de comidas que hacían los animales, ya que muchas personas les daban de comer sin mesura alguna. «Esto provocaba el acomodamiento de los gatos, que además estaban dejando de perseguir a las ratas, ya que estaban saciados por la comida que les daban», asegura Rodríguez. Los vecinos no solo tenían que lidiar con las heces de los felinos, sino también con los vómitos por los empachos de comida o con el continuo pasear cual fuera la hora incluso la de tirar la basura. Por ello, ante las reiteradas denuncias de los vecinos, el Ayuntamiento se reunió con los afectados y los defendores de los animales para encontrar una solución, que no fuera la de la exterminación o la de una perrera, para garantizar el bienestar de animales y vecinos. Optaron por el Proyecto CES conocido así por capturar, esterilizar y soltar a los gatos, en el que por primera vez un gobierno municipal participa activamente en él. Pero lo hace con una diferencia: en vez de soltarlos en el mismo lugar, se les busca una familia de acogida. Después de esterilizar a los gatos, gracias a la colaboración de una clínica veterinaria, los voluntarios buscan entre los vecinos y los dueños de las parcelas de cultivo una familia en la que estos gatos puedan tener una vida más cómoda que la calle. Pese a que el problema se erradique, el Ayuntamiento hará un seguimiento para evitar la procreación, dado que el 70 por ciento de los gatos eran hembras, lo que implica un mayor riesgo de que vuelva a crecer la colonia.