La extradición a EEUU del colombiano Diego León Montoya Sánchez, conocido como Don Diego, principal cabecilla del cartel del Norte del Valle, marca el fin de esa organización acusada de enviar al mercado estadounidense unas 500 toneladas de cocaína desde 1990 a 2004, afirmaron ayer las autoridades colombianas.
Don Diego, detenido en septiembre de 2007 en su región, el departamento del Valle del Cauca (suroeste), fue entregado a agentes del Departamento Estadounidense Antidrogas y partió hacia EEUU, donde lo reclaman tribunales de Florida y Nueva York. "Con la extradición de este narcotraficante se acabó el cartel del Norte del Valle", declaró el general Óscar Naranjo, director de la Policía colombiana. Agregó que "esta extradición coincide con una noticia alentadora, y es que la lucha contra el narcotráfico está dando frutos positivos, al lograr que el precio de la cocaína se haya disparado en EEUU y que su calidad se esté reduciendo hasta en un 46%".
Asesinatos. En enero pasado había sido asesinado en Venezuela el otro jefe del cartel del Norte del Valle del Cauca, Wilber Varela, alias Jabón, con quien Don Diego libró una guerra a muerte que dejó medio millar de muertos en el Valle del Cauca. El extraditado estaba en la prisión de alta seguridad de Cómbita, a 180 kilómetros al norte de Bogotá, y, después de su traslado en helicóptero al aeropuerto de la capital colombiana, salió hacia Florida en una aeronave de la DEA. Aunque el Gobierno colombiano había aprobado su extradición el pasado 14 de noviembre, el trámite tardó casi un mes debido a un recurso de la defensa de Montoya.
Don Diego fue arrestado en septiembre del año pasado en una finca del departamento del Valle del Cauca en la que se escondía, en medio de una persecución que emprendieron las autoridades en el 2004. El traficante de drogas figuraba en una lista de las diez personas consideradas más peligrosas del mundo por Estados Unidos.