Lo intentaron, lo consiguieron, pero finalmente esta historia no tuvo un final feliz. Los Bomberos de Utrera tuvieron que subir a lo más alto de un depósito de agua situado en la barriada Muñoz Grandes, a 33 metros de altura, para rescatar una cigüeña que había quedado atrapada. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos, el ave terminó falleciendo por agotamiento.
Fue un ciudadano el que llamó a los servicios de emergencia alertando de que en la parte superior de dicha infraestructura había un nido con dos cigüeñas, una de las cuales se encontraba atrapada.
De inmediato, miembros de la Policía Local y de los Bomberos se personaron en el lugar, y comprobaron que el pájaro colgaba sin poder hacer nada para recuperar su posición normal. Fue entonces cuando empezaron las maniobras que llevaron a los bomberos a subir por la pared del depósito de agua, siguiendo la escalera fijada en uno de los costados, y sirviéndose de una línea de vida, esto es, una cuerda que va marcando el camino para facilitar la sujeción y evitar caídas.
Fueron 33 metros de altura los que tuvieron que recorrer por encima de la atenta mirada de las muchas personas que en ese momento ya se daban cita a los pies del depósito de agua esperando conocer el resultado del rescate. Y la cigüeña, mientras tanto, seguía luchando por salvarse. Cuando los bomberos alcanzaron la cumbre, vieron cómo el ave estaba amarrada en una de sus patas y en el propio nido. “Ha podido ser alguna cuerda que haya cogido la cigüeña junto a otras ramas, y se quedó enganchada”, explicaron los bomberos.
Por ello, estaba colgando, suspendida en el aire, ahogando el último aliento de vida, ya que “murió por agotamiento, intentando escapar de la situación en la que estaba, y que se agravó por el intenso calor que se registraba en ese momento”.
Y es que, si estaba viva antes de que los bomberos escalaran a la parte más alta del depósito de agua, la protagonista de esta historia no pudo aguantar el agobiante estado en el que se encontraba, sin saber qué sería de ella y, envuelta en su miedo e intentando soltarse, no se percató de que estaba rozando la supervivencia con su pico y sus alas
