Toda Europa mirará este martes hacia Berlín. François Hollande, vencedor de las últimas elecciones en Francia , visitará a la canciller alemana, Angela Merkel, horas después de su investidura en el que será su primer acto como jefe del estado galo.
El séptimo presidente de la V República, que acaba de asumir el cargo, revelará el nombre de su primer ministro y se desplazará a la capital alemana.
Su encuentro con Merkel supone también la primera visita de Hollande al extranjero como presidente y escenifica la importancia y la amistad que pretenden seguir formando el eje franco-alemán. Merkel, por su parte, ha dicho que lo recibirá con los brazos abiertos, pero con el pacto fiscal de la UE cerrado a cal y canto y su rechazo total a toda posible renegociación o modificación del mismo.
A pesar de que nunca antes han coincidido en persona, ambos han mantenido varias conversaciones telefónicas desde el triunfo electoral de Hollande con el fin de iniciar su acercamiento y preparar la cita en la Cancillería Federal, que tantas espectativas ha levantado.
"Será una conversación para conocerse, pero pienso que a partir de ella se desarrollará una buena cooperación", dijo la propia Merkel este fin de semana.
"Sabemos desde que se fundó la República Federal que unas buenas relaciones franco-alemanas son muy importantes para ambos países. Y por ello me alegro de que el martes pueda saludar por primera vez a Hollande como nuevo presidente francés en Berlín", añadió Merkel.