Desde que murió Camarón de la Isla el mundo discográfico busca sustituto al genio, con poca fortuna. Universal lo intenta ahora con el madrileño Enrique el Piculabe y su obra Camino y tiempo, una producción costosa y cuidada para sorprender no sólo a los nostálgicos del de San Fernando, sino a quienes no acaban de sentirse llenos con Estrella Morente, Arcángel o Miguel Poveda. Enrique el Piculabe tiene unas condiciones fantásticas para el cante flamenco y, sobre todo, una voz prodigiosa. A Camarón se lo sabe al dedillo. Lo que hace falta es que sea capaz de ir más allá.