Zona de la muralla almohade de Marchena al que se le reconoce su derecho al 1% cultural. / El Correo
La Audiencia Nacional (AN), finalmente, ha declarado el "derecho" del Ayuntamiento de Marchena (Sevilla), gobernado por Juan Antonio Zambrano (PSOE), a percibir íntegramente del Ministerio de Fomento la subvención de 492.874 euros acordada en 2011 en el seno de la comisión del programa del uno por ciento cultural, para la restauración de la muralla almohade del municipio, levantada en el siglo XIII y aquejada de graves deficiencias.
Recordemos que el 21 de octubre de 2011, la comisión mixta constituida entre los ministerios de Fomento y Cultura para el programa del uno por ciento cultural, que destina ese porcentaje del presupuesto del Ministerio de Fomento a la recuperación del patrimonio histórico, acordó librar 492.874 euros para la primera fase del proyecto de restauración de la muralla almohade de Marchena. La intervención comprendía labores de restauración en cuatro lienzos de muralla y cinco torres de un tramo de 132 metros del perímetro amurallado de Marchena, cuyo casco histórico cuenta desde 1996 con la declaración de Conjunto Histórico Artístico.
"GRIETAS Y FISURAS" EN LA MURALLA El propio Ministerio de Fomento, en el comunicado informativo emitido en aquellos días sobre esta subvención, señalaba que este tramo del recinto amurallado de Marchena "presenta un estado de conservación muy malo, con importantes grietas y fisuras y situaciones serias de desplome, mostrando una importante erosión de su superficie".
Pero el 20 de septiembre de 2012, tras el desembarco del PP en el Gobierno central, el subdirector general de Arquitectura y Edificación del Ministerio de Fomento, Francisco Javier Martín, rubricó un documento destinado al Ayuntamiento de Marchena acerca del destino de este expediente. En este documento, recogido por Europa Press, el Ministerio de Fomento comunicaba que el convenio relativo a esta subvención no había sido materializado porque el V acuerdo de colaboración interministerial relativo al programa del uno por ciento cultural estaba siendo objeto de "revisión", toda vez que la "coyuntura presupuestaria" obligaba a cursar una nueva convocatoria con "nuevos requisitos y criterios a la hora de seleccionar las actuaciones".
