La afirmación de que “el PER fomenta la vagancia” le puede salir cara al presidente de Sacyr, Luis del Rivero, si no se arrepiente, ya que podría quedarse sin una sola obra pública en la provincia.
Lo plantea así la Diputación de Sevilla, que estudiará, a petición del PA, la viabilidad jurídica de incluir mecanismos que penalicen a la constructora en los concursos públicos. Ese castigo se amplió en el pleno por una enmienda de IU, que pidió a los servicios jurídicos que analicen si es posible rescindir los contratos ya adjudicados a Sacyr, como esta semana el de las canalizaciones del pantano de Melonares.
De momento, se llevó dos regalos: una carta del presidente, Fernando Rodríguez Villalobos, exigiendo una disculpa, y el título de non grato. Todo ello fue aprobado en un pleno en el que diputados provinciales como José Antonio Sánchez (PA), mostraron sus sospechas de que “hay una campaña orquestada contra el PER”. Y recordó otras críticas como las de la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre.
El veto tuvo el respaldo del PSOE, PA e IU. El PP no votó, pero sí cargó contra el responsable de Sacyr. “Es un bocazas y un papanatas”, le recriminó Eloy Carmona (PP). Pero, aunque fuera por la duda por la posible legalidad de ese castigo, se abstuvieron.
