Rebuscar en los contenedores de basura en Sevilla seguirá estando penado con una sanción de 750 euros, que no podrán ser sustituidos por atención social, tal y como había propuesto el alcalde, Juan Ignacio Zoido, en octubre.
Pleno del ayuntamiento de Sevilla. / José Luis Montero
La polémica ordenanza de limpieza pública y gestión de residuos entró en vigor hace dos meses. Ante la enorme controversia que generó tras las críticas de diversas asociaciones por elevar estas sanciones en tiempos de crisis, la concejal de Asuntos Sociales, Dolores de Pablo-Blanco, anunció que el consistorio estudiaba la posibilidad de que los multados pudieran elegir entre pagar la cuantía de 90 a 750 euros o recibir atención social. De hecho, el regidor pidió al secretario del Ayuntamiento un informe para incluir en la ordenanza que se ofreciera esta alternativa. Sin embargo ayer el delegado de Urbanismo y Medio Ambiente, Maximiliano Vílchez, confirmó que esta opción finalmente no será posible. A preguntas de la portavoz de IU, Josefa Medrano, explicó que el informe del secretario municipal indica que el gobierno «no tiene la habilitación legal para poder cambiar la sanción económica por atención social, ya que para eso hace falta una norma de rango superior». Vílchez también informó de que en estos dos meses de vigencia, no se ha impuesto ninguna sanción por rebuscar en la basura, y recordó que esta práctica ya estaba prohibida en una normativa de 2003, acordada por el anterior equipo de gobierno (PSOE-IU), aunque las penas iba de 90 a 300 euros. Incluso, subrayó, «los infractores estaban obligados entonces a limpiar el área ensuciada».
Medrano le recordó que esa norma se aprobó antes de que ella llegara al consistorio e preguntó a Vílchez si ese informe significa que las multas seguirán vigentes, a lo que el delegado respondió que el gobierno «no puede cambiar la ordenanza porque lo impide la normativa actual». Posteriormente, fuentes municipales quisieron aclarar que «la voluntad firme del Ayuntamiento es que se dé esa posibilidad a los sancionados, por lo que se estudiará otras vías legales para ello, y mientras no habrá multas aunque no se puede garantizar en todos los casos, sino un trabajo informativo, disuasorio y de persuasión». Las citadas fuentes indicaron que Vílchez no lo dijo ayer porque Medrano no se lo preguntó, y el formato del Pleno no lo permitía.
El PSOE presentó también una moción por trámite de urgencia, pidiendo que «de manera inmediata se suspenda la consideración como infracción extraer o rebuscar residuos una vez depositados en contenedores». Pese al apoyo de IU, la mayoría del PP rechazó tramitarla por urgencia, por lo que finalmente no se abordó.
