Un verano más, buena parte del trabajo de la dirección deportiva del Sevilla ha estado basado en dar salida a los jugadores con los que no se cuenta. Si en los prolegómenos de la pasada campaña Monchi fue capaz de buscar destino a casi todos los futbolistas con los que no contaba Marcelino, en éste ha firmado un pleno con los que Míchel no pensaba contar.
El último en marcharse ha sido Lautaro Acosta, que ya anunció hace unos días que su futuro futbolístico estaría ligado a Argentina, su país natal. De hecho, el jugador que llegara del Lanus recalará en uno de los históricos del continente sudamericano, el Boca Juniors. Tanto es así, que ayer pasó el reconocimiento médico con la entidad xeneize en la Clínica Rossi de Buenos Aires, durante la tarde estuvo perfilando el que será su contrato y poco después fue presentado como nuevo jugador del equipo del barrio de la Boca, que aprovechó la anunciada presentación de Guillermo Burdisso para hacer lo propio con el 'Laucha'.
Acosta recala en Boca Juniors a préstamo durante una temporada, una fórmula extraña teniendo en cuenta que el ‘Laucha' termina su contrato con el Sevilla el 30 de junio de 2013. Sin embargo, la operación encierra unos entresijos por los que el club nervionense ingresaría una suma cuando Acosta quede libre al término de la temporada que está a punto de comenzar.
El pase se hizo oficial a última hora de ayer, ya que espiraba el plazo para inscribir jugadores para la próxima edición del Torneo Apertura argentino.
Confirmada la marcha de Acosta, serán diez los hombres que habrán abandonado la disciplina del Sevilla. Kanouté, Koné, De Mul y Deivid acabaron su contrato; Alexis, Javi Varas y Guarente han salido como cedidos; y Romaric y Escudé rescindieron su contrato con el club de Nervión.
