¿Es posible una democracia sin debate sobre el estado de la Nación? Quizá ocurra sólo por este año: el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha planteado no celebrarlo por ahora con el precedente de que estas citas parlamentarias han esquivado los años electorales. Al presidente también le conviene tácticamente porque el contenido de la sesión lo constituiría la sucesión de recortes y ajustes, nada populares y sin mención en el programa electoral, lo que dejaría al Ejecutivo a la defensiva.
El rotativo madrileño El mundo expuso en su edición de ayer que este asunto enfrenta al Gobierno con sus propios parlamentarios, partidarios de que el debate se celebre, aunque tal vez no antes del verano, como viene siendo habitual, sino después. La oposición también reclama control parlamentario sobre toda la serie de medidas económicas de calado ya adoptadas -y sobre las que el propio Rajoy anuncia que vendrán-.
Así, la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, reclamó al presidente "que dé la cara en el Debate sobre el estado de la Nación", al tiempo que alertó del "grave deterioro democrático" que, a su juicio, ocasiona el PP con estas dudas sobre la celebración de la sesión.
Rodríguez, que acudió a la manifestación celebrada en Valladolid para protestar contra los recortes, señaló que un presidente "debe comparecer, debe dar la cara y debe someterse al debate". En este sentido, tachó de "acto de cobardía y escapismo" por parte de Rajoy la posibilidad de que este año se suspenda el debate de la Nación.
"Al presidente del Gobierno sólo le gusta comparecer a puerta cerrada en el Congreso con su grupo parlamentario, o en actos de su partido para mayor gloria de él mismo y de Esperanza Aguirre", expresó Rodríguez.
En este sentido abundó también el secretario de Organización del PSOE, Oscar López, quien aseguró son los dirigentes del PP "quienes no pueden salir a la calle, ni mirar a los ojos de los españoles" después "de haberles engañado y estafado".
López respondió así a las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que aseguró el sábado que si fuera del PSOE le daría vergüenza salir a la calle.
También destacó el "retroceso en derechos" que, a su juicio, ha traído el nuevo Gobierno con la posibilidad de que el presidente no comparezca en el Congreso en el debate sobre el estado de la Nación.
En el mismo sentido, El diputado de IU Gaspar Llamazares pidió ayer a Rajoy que explique sus medidas en la Cámara y no eluda dar explicaciones sobre el actual estado de "demolición" -en alusión al Debate sobre el Estado de la Nación-. Hizo estas declaraciones durante la protesta de Gijón. Llamazares recordó que las movilizaciones se repiten en todo el país como una oposición al "asalto ilegítimo al Estado del Bienestar".
