El Gobierno español sufrió ayer un fuerte varapalo al conocer las previsiones económicas que calcula para el país la Comisión Europea, mucho peores que las que presentó el Consejo de Ministros hace sólo cuatro días. Lo peor, 19 de cada 100 personas estarán en paro.
Bruselas ofreció ayer sus nuevas previsiones económicas para la Eurozona, y auguró una caída en España del 2% este año -cuatro décimas más que la calculada por el Gobierno-, al tiempo que señaló que la recesión no acabará en 2008 y habrá un nuevo retroceso del PIB, del 0,2% en 2010, frente al crecimiento del 1,2% que estima el Ejecutivo de Zapatero.
La CE cree incluso que la tasa de paro en España subirá hasta el 16,1% este año y se disparará el que viene hasta rozar el 19% (el 18,7%), porcentajes ambos mucho más pesimistas que los del escenario macroeconómico vislumbrado por el ministro Pedro Solbes, que hablan de un desempleo del 15,9% y del 15,7%, respectivamente. De cumplirse las estimaciones comunitarias, España tocaría los 4 millones de personas sin trabajo en 2009 y los superaría ampliamente (4,3 millones) en 2010.
Los augurios de Bruselas no son mejores para las cuentas públicas españolas. Frente al déficit del 5,8% del PIB que Solbes calcula habrá al cierre de este ejercicio, la Comisión eleva este porcentaje al 6,2% y el de 2010 al 5,7% (frente al 4,8% del Gobierno). La recuperación española será más lenta que en la mayoría de los países del Eurosistema, que volverán a crecer en 2010. Esto será así, según el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, por la corrección del mercado inmobiliario español, "que es más difícil y toma más tiempo que otros sectores". "Y de todos es conocidos el peso que tiene la vivienda en la economía española".
Desde el Ejecutivo español no se tiene esta impresión. Pedro Solbes insistió en que la economía de este país tocará fondo este año y volverá a crecer en 2010, además de descartar una tasa de paro del 19% o cuatro millones de desempleados.
A pesar de subrayar que Bruselas evalúa de forma distinta el efecto de las medidas contra la crisis y otros factores como la evolución de la población activa y la generación de empleo, el ministro reconoció que, en el actual contexto de gran volatilidad, es "muy complicado" intentar afinar mucho las previsiones.
Antes de conocerse las previsiones comunitarias, José Luis Rodríguez Zapatero, se mostró convencido de que la economía española se va a recuperar "en el mismo momento en el que el contexto internacional lo facilite". "Vamos a trabajar para no llegar a los cuatro millones de parados", aseguró Zapatero, quien, no obstante, indicó que se debería "huir" de esas referencias, "porque son relativas", ya que ahora hay más población ocupada que en el pasado.
Por lo demás, el Ejecutivo comunitario también rebajó las previsiones económicas para la Unión Europea y la Eurozona.
