Los antiguos mineros de Boliden siguen en pie de guerra en su conflicto laboral con la Junta de Andalucía y ayer se encerraron en la Consejería de Empleo, de donde fueron desalojados como 48 horas antes lo habían sido de las vías del AVE. Esta vez no hay detenidos, pero sí dos heridos, leves, y los nervios cada vez más crispados.
Después de ser desalojados de las instalaciones de la avenida de Hytasa, los antiguos trabajadores de la mina cuya balsa de residuos reventó en Aznalcóllar en 1998 provocando un vertido tóxico, se trasladaron al Parlamento de Andalucía a cuyas puerta se concentraron con pancartas en contra del "incumplimiento" de los acuerdos, según ellos, por parte de la Junta de Andalucía.
El consejero de Empleo, Antonio Fernández, afirmó que los ex mineros "no tienen motivo ético ni moral para hacer lo que están haciendo", ya que "hay documentos" que reconocen ofertas de empleo por ellos rechazadas. "No tienen legitimidad moral para tomar violentamente una sede administrativa en la que han hecho daño a funcionarios, a los que han empujado y tratado violentamente", continuó el consejero. En su opinión, "tienen un problema de actitud, que es poco urbana", cuando son "unos auténticos privilegiados" que después de encontrar un puesto de trabajo lo rechazan.
Por ello, concluyó: "La posición que tienen busca un objetivo distinto a encontrar empleo, porque ya se les ofreció en Cobre las Cruces". Se refirió así a las ofertas en firme para trabajar en esta mina, que, entre otras cosas, rechazan porque no están conformes con el sueldo.
Por su parte, el portavoz del colectivo, Juan José Fernández, precisó a la agencia Europa Press que una delegación de este grupo entró en el Parlamento de Andalucía para entrevistarse con parlamentarios de IU y del PP y estaban haciendo gestiones para también hablar con los del PSOE. Tienen previsto entregar a todos los partidos un documento con sus reclamaciones, con el objeto de "hacerles ver quién realmente miente" y decirles que no están "comiendo de la sopa boba".
Tras lamentar que durante 10 años se haya estado "politizando el conflicto laboral", hizo un paralelismo con la situación de los ex trabajadores de Delphi. En este sentido, expuso que, "al igual que con Boliden", la Junta de Andalucía se hizo "cargo del patrimonio de Delphi tras el acuerdo con los sindicatos", con los que se comprometió "a solucionar su futuro laboral". Para agregar: "Es el mismo compromiso que adquirieron con nosotros y que ahora incumplen".
Demanda. Piden la "vuelta a las negociaciones" para la recolocación y recordó que no hay, por el momento, "ninguna nueva reunión prevista". La última tuvo lugar el pasado 20 de enero, tras lo que la Junta de Andalucía aseguró que había "cumplido sus compromisos" con los ex mineros y se ratificó en la posición manifestada en las actas de la mesa de seguimiento del plan de recolocación, en las que se hace referencia a la "falta de voluntad" por parte de los trabajadores, quienes quedarían excluidos del acuerdo si incumplían las obligaciones contempladas en éste.
En este sentido, fuentes de la Junta de Andalucía insistieron entonces en la continuidad de su postura ante los ex mineros, tras la finalización de la reunión mantenida por parte de representantes de las delegaciones provinciales de Empleo e Innovación, Ciencia y Empresa, junto a dirigentes de CCOO, que plantearon una revisión de la situación actual de los afectados.
Los 75 ex mineros de Boliden, de los que dos se quedaron en la empresa pública de gestión medioambiental Egmasa, trabajaron en el plan de abandono y restauración de las instalaciones de la siniestrada mina de Aznalcóllar, desarrolladas por la misma. Para diciembre de diciembre de 2008 estaba prevista su recolocación, la mayoría en la futura mina de Las Cruces.
