El presidente de la Fundación del Betis, Rafael Gordillo, y el técnico de la primera plantilla, Pepe Mel, se refirieron ayer a las polémicas declaraciones del entrenador del Sevilla, José Miguel González, Míchel, en las que apuntaba que las aspiraciones de ambos conjuntos "serán diferentes" en la campaña 2012-13.
Antes del bautizo del anterior ejercicio, el entonces preparador del cuadro nervionense, el asturiano Marcelino García Toral, se erigió en protagonista cuando afirmó que el plantel blanquirrojo "tenía objetivos más ambiciosos" que el de La Palmera.
Míchel declaró a Eldesmarque que "el Sevilla y el Betis no aspiran a lo mismo. Creo que el Sevilla va por delante". Rafael Gordillo, presidente de la Fundación, se erigió ayer en portavoz de la entidad durante la presentación del campus veraniego que organizará el staff de cantera en Armilla. En primer lugar, el exinternacional se pronunció sobre la relación entre Míchel y Mel.
"Lo de Mel y Míchel es una cosa personal entre ellos. No tengo ni idea de lo que ocurre con ellos, ya se arreglarán", indicó de forma elegante antes de aclarar que "Míchel me ha dicho que no dijo nada del Betis". "Las cosas entre ambos clubes están bien, lo otro es una cosa personal", añadió.
Aunque, entregado a la obviedad, Gordillo fue crítico con el técnico nervionense. "Sí, es verdad que se equivoca en decirlo públicamente", subrayó.
Si Gordillo fue elegante con el técnico del Sevilla, Pepe Mel, su homólogo heliopolitano, opinó en idéntica línea. Muy escueto fue en su declaración el técnico madrileño. "No cabe nada más que decir. Por mi parte está olvidado, ya dije todo lo que tenía que decir y espero que nos vaya genial a los dos", dijo después de ser premiado por la Agrupación de Béticos Veteranos en el NH Plaza de Armas. El preparador verdiblanco no mantiene una buena relación con el entrenador sevillista, aunque optó por "zanjar" el tema.
