El Sevilla ha cambiado su dinámica de un plumazo. Después del debut de Míchel en Anoeta acumulaba ocho partidos sin ganar (2 puntos de 24 posibles), merced a sus seis derrotas y dos empates). Estaba más cerca del descenso que de la Europa League o la Champions y el panorama era bastante desolador. Ahora, sin embargo, el Sevilla se ha metido de lleno en la pelea por los puestos de competición continental, gracias a una serie de cinco victorias en las ocho últimas jornadas. En total ha sumado 16 puntos de 24 posibles, bagaje que sólo Barcelona (24) y Real Madrid (20) superan.
Con su nuevo técnico, el equipo de Nervión ha ganado casi tantos partidos (5) en las nueve jornadas que lleva al frente del banquillo como su antecesor en las 21 anteriores (6). Míchel, qué duda cabe, representa un soplo de aire fresco quey se está viendo reflejado tanto en el juego como en los resultados.
El pasado fin de semana, el Sevilla logró su tercer triunfo consecutivo, algo que no se veía desde tiempos de Manolo Jiménez. Esta buena racha lo sitúa muy cerca del récord histórico del club en Primera (5 victorias consecutivas). Para hacerse una idea: sólo en cuatro ocasiones en los 106 años de historia de la entidad se alcanzó esta cifra.
El precedente más cercano data de la temporada 2009/10 (jornadas 2ª a 6ª), con Jiménez en el banquillo. Por aquel entonces hacía casi veinte años que el Sevilla no ganaba cinco partidos consecutivos. El de Luis Aragonés, en la campaña 1990/91 (jornadas 4ª a 8ª), era la referencia. No obstante, poco antes Vicente Cantatore había logrado ese mismo registro (temporada 1989/90, jornadas 23ª a 27ª). El chileno igualaba por primera vez el récord que estaba en posesión del Sevilla de Ramón Encinas (1946/47, jornadas 8ª a 12ª).
Además, se da la circunstancia de que el Sevilla de Míchel va a jugarse la posibilidad alcanzar ese récord en cuestión de cinco días, ya que visita al Athletic el domingo y el jueves siguiente recibirá al Zaragoza de Jiménez.
BUSCANDO LA CUARTA. ¿Será capaz ahora de igualar la mejor marca de la historia del club? Si el equipo continúa en esta dinámica, evidentemente todo es posible. Antes, sin embargo, deberá pasar una prueba de fuego: San Mamés y el Athletic de Marcelo Bielsa.
Si el conjunto nervionense gana a los leones, alcanzaría la cifra de cuatro victorias consecutivas, otra racha que tampoco tiene demasiados precedentes en los anales de la entidad: quince, aparte de las cuatro rachas de cinco victorias consecutivas antes mencionadas. Cuatro esas quince rachas se han logrado en la última década: temporadas 2001/02, 2007/08, y 2008/09 (dos veces). Joaquín Caparrós dirigía al plantel en la primera de ellas y Jiménez, en las otras tres.
LA REFERENCIA. El precedente más cercano, por tanto, de una racha de cuatro victorias consecutivas está en la temporada 2009/10, cuando incluso se llegó a ampliar a cinco, ya que el Sevilla derrotó sucesivamente a Zaragoza, Osasuna, Mallorca y Athletic y Real Madrid (jornadas 2ª y 6ª). La afición del Sánchez-Pizjuán no ve una racha parecida desde hace más de tres años. Si el Sevilla es capaz de emularla, su presencia en competiciones europeas estará más cerca.
