El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), advirtió hoy de que la recuperación económica exige "un sacrificio a todos los niveles", en clara alusión al real decreto Ley promulgado por el Gobierno central para adelgazar el gasto público, y aunque llamó a un "esfuerzo colectivo" para levantar la economía, abogó por acometer los reajustes promovidos en las administraciones públicas "sin dejar a nadie atrás", en referencia a los beneficiarios de las prestaciones y los servicios públicos.
Sánchez Monteseirín presidió hoy, junto a la consejera de Presidencia, María del Mar Moreno, el acto de entrega de las Medallas de la Ciudad, un escenario en el que no eludió el debate surgido a cuenta del mencionado decreto Ley, que veta el endeudamiento de las administraciones públicas y estipula una reducción salarial para todo este sector. Su aplicación, por lo que al Ayuntamiento hispalense se refiere, afectará a 5.459 funcionarios municipales o miembros del personal laboral en grados que oscilan entre los 18,28 euros y los 6.568,97 euros anuales.
Es más, el Ayuntamiento estudia actualmente si existe la posibilidad jurídica de aplicar ajustes salariales de esta misma naturaleza en sus empresas públicas, pues Transportes Urbanos de Sevilla (Tussam), por ejemplo, suma casi 1.500 empleados y sólo en 2005 destinó más de 65 millones de euros al capítulo de personal.
El alcalde de Sevilla destacó lo difícil del actual escenario económico y consideró que, "a todas las escalas", es necesario "un esfuerzo colectivo" para remontar los crudos datos de desempleo y de desaparición de las empresas, lo que le llevó a llamar a la competitividad a la patronal y al esfuerzo y a la calidad a los trabajadores. "Somos una comunidad fuerte", proclamó Sánchez Monteseirín, quien manifestó su convicción en que la sociedad sevillana, andaluza y española superará la crisis.
"SIN DEJAR A NADIE ATRAS"
No obstante, insistió en que para ello, es necesario "un esfuerzo a todos los niveles", en clara alusión al reajuste del sector público promovido desde el Gobierno central mediante el mencionado real decreto Ley. Sin embargo, el alcalde hispalense defendió la necesidad de aplicar estas políticas de reducción del gasto público "sin dejar a nadie atrás".
Además, Sánchez Monteseirín advirtió de que una vez que, finalmente, se haya "capeado el temporal", no bastará con "respirar aliviados", porque dadas las causas y consecuencias de la crisis, "esto no puede quedar así". Por eso, llamó a una transformación de los modelos productivos en los que "la equidad y los valores humanos" prevalezcan sobre los intereses financieros, al objeto de que el devenir de la sociedad no está sujeto a "la intoxicación financiera y la presión especulativa".
Al respecto, y de cara a este ajuste que afronta el sector público, el primer edil recordó que la ciudad, en comparación con otras urbes españolas de similar rango, ha "sufrido menos el azote de la crisis" debido al menor grado de endeudamiento de la Administración local y los pasados repuntes en la creación de empleo, con lo que confió en los proyectos actualmente en marcho como estímulos para la economía local.
