Penélope Cruz, la única actriz española que ha competido por un Óscar, se coloca este año de nuevo en la carrera por la preciada estatuilla gracias a su papel de mujer desquiciada en Vicky Cristina Barcelona, de Woody Allen. El mayor número de candidaturas lo ostenta, no obstante, El curioso caso de Benjamin Button.
Este año, Penélope parte como la clara favorita para hacerse con el Óscar a la mejor actriz secundaria, dado que su máxima rival, la británica Kate Winslet, luchará también en la categoría de mejor actriz por su papel en El lector.
Con la nominación de ayer, la madrileña refrenda así su magnífico momento, tras haber conseguido una candidatura al Globo de Oro como mejor actriz de reparto, un premio que se llevó Winslet por un papel que la Academia de Hollywood ha determinado que compita finalmente en la categoría de mejor actriz.
Aunque las previsiones apuntaban a que Winslet sería candidata a mejor actriz por su trabajo en Revolutionary Road, dirigida por su marido, Sam Mendes, y acompañada en el reparto por su gran amigo Leonardo DiCaprio, el elegido ha sido su rol en El lector, donde aparece menos tiempo en pantalla aunque su personaje es el principal. Es la segunda candidatura que logra Cruz, tras la obtenida por Volver (2006) como mejor actriz, en una ceremonia donde resultó ganadora la británica Helen Mirren, por The Queen. Esta vez, la madrileña se medirá con Amy Adams (La duda), Viola Davis (La duda), Taraji P. Henson (El curioso caso de Benjamin Button) y Marisa Tomei (The Wrestler).
Por lo demás, El curioso caso de Benjamin Button, protagonizada por Brad Pitt, parte como favorita con 13 candidaturas, seguida por la independiente Slumdog Millionaire, con diez. La historia de Benjamin Button competirá por el Óscar a la Mejor película, dirección (David Fincher), actor protagonista (Brad Pitt), actriz secundaria (Taraji P. Henson), banda sonora y guión adaptado, así como en otras siete categorías de carácter técnico. Le sigue con diez nominaciones el filme revelación del año, Slumdog Millionaire, cinta independiente de producción británica que narra la vida de unos jóvenes indios de los suburbios de Bombai. Slumdog Millionaire optará al premio a la Mejor película, guión adaptado, banda sonora y dirección, entre otras categorías, si bien no recibió ningún reconocimiento a la labor interpretativa.
El caballero oscuro y Mi nombre es Harvey Milk obtuvieron ocho candidaturas respectivamente, si bien la taquillera secuela de Batman se volvió a quedar fuera de las categorías principales y optará a Óscar técnicos, con la excepción de la previsible nominación de Heath Ledger como actor de reparto.
Ledger, que falleció hace ayer un año, es el favorito para alzarse con la estatuilla después de haber arrasado en los premios de la crítica. Mi nombre es Harvey Milk, ignorada en los Globos de Oro, se resarció en los Óscar con candidaturas a Mejor película, dirección (Gus Van Sant), actor protagonista (Sean Penn), actor secundario (Josh Brolin), banda sonora, guión original, vestuario y edición. El Lector, con cinco nominaciones, fue una de las sorpresas de la jornada al entrar en competición en las categorías principales. Esta cinta disputará el Óscar a Mejor película, dirección (Stephen Daldry), guión adaptado, cinematografía y actriz protagonista (Kate Winslet).
Además de Pitt, Penn, y Langella, Richard Jenkis (The visitor) y Mickey Rourke (The Wrestler) pelearán por el Óscar de actor protagonista. Por parte de las mujeres, Meryl Streep (La duda), Angelina Jolie (El intercambio), Anne Hathaway (La boda de Rachel) y Melissa Leo (Frozen river) se medirán con Winslet por el premio.
Penélope logra por fin, con su segunda candidatura, lo que buscaba desde hace tiempo: conjugar el nivel interpretativo con el éxito comercial y crítico en Hollywood.
