Beto, llegando ayer a Sevilla (Foto: Jesús Barrera).
La peor de las noticias para la portería del Sevilla se ha confirmardo: Beto tendrá que estar alejado de los terrenos de juego entre dos y tres meses (diez semanas como mínimo) por una luxación grado III en su hombro izquierdo. Así lo explicó el jefe de los servicios médicos del Sevilla, Juan José Jiménez: "Se le han practicados una resonancia y una ecografía. El diagnóstico es una luxación grado III, con algunos ligamentos rotos. Lo habitual es una intervención quirúrgica y es lo que estamos estudiando. Si realizar un tratamiento conservador u operar".
El portugués se puede perder buena parte de la temporada que resta, ya que estaría para abril o mayo, mes en el que concluye la competición. Aunque pueda acortar los plazos, lo seguro es que se trata de una baja sensible, en una posición muy específica y un jugador en el que Unai Emery tiene depositada una confianza ciega. Ahora deberá ser Sergio Rico el que defienda los tres palos de la portería sevillista. El canterano ha dado el salto al primer equipo sin ningún tipo de trauma. Ha superado cada prueba del camino y ahora se encuentra ante la posibilidad de su vida, ya que podría afianzarse en un equipo de élite. En campos como Cornellà o el Santiago Bernabéu, los dos más recientes, enseñó de lo que es capaz, con intervenciones de mérito.
Por último, esta lesión vuelve a poner a Barbosa en el punto de mira. El encargado de agitar la competencia entre los palos del Sevilla lleva una temporada casi en blanco. Puede que ahora le toque defender la portería en alguna que otra ocasión y debe estar preparado para ello.
